El Consejo Asesor de Telecomunicaciones propone subir un 60% las llamadas urbanas

El Consejo Asesor de Telecomunicaciones ha propuesto al Gobierno una subida de entre un 50% y un 60% de las tarifas urbanas telefónicas para ajustarlas a sus actuales costes, según dijo ayer el ministro de Obras Públicas, Transportes y Medio Ambiente, José Borrell, al término de la reunión del citado organismo.La comisión del Consejo, encargada de estudiar la reestructuración de las tarifas, ha propuesto además bajar el coste de la llamada provincial en un 30% y bajar también en otro 30% la cuota de conexión. Paralelamente deberán bajar, a juicio del Consejo de Telecomunicaciones, entre un 30% y un 40% las llamadas europeas y las llamadas nacionales. También deberán bajar un 40% las tarifas de los circuitos alquilados.

No ha existido decisión unánime del Consejo respecto al tiempo de aplicación de estas tarifas. Todos dicen que debe hacerse, desde luego, antes de los próximos tres años y medio (plazo que queda hasta 1998, en que los servicios de telecomunicación deberán quedar liberalizados, según la normativa comunitaria). Los representantes de consumidores y usuarios son partidarios de que la reestructuración de tarifas se haga cuanto antes.

Subida razonable

En la anterior reunión del Consejo, celebrada el pasado día 9, Borrell dijo que le parecía razonable una subida de las llamadas urbanas de unas cinco pesetas y una bajada de las interurbanas de unas 35 pesetas para este mismo año. El Consejo ha estudiado ahora la política de tarifas telefónicas desde este año hasta 1998 y ha estimado que debe producirse la reestructuración antes de la liberalización."La posición del Consejo y del Gobierno", dijo Borrell, "es que se liberalicen las tarifas telefónicas en el plazo previsto, ni antes ni después de 1998, aunque sabemos que España tiene la posibilidad de otros cinco años de prórroga, al igual que otros cinco países".

Las tres condiciones expuestas por el Consejo de Telecomunicaciones para aplicar la reestructuración antes de liberalizar el mercado se refieren en primer lugar a la universalización del servicio "con el fin de que lleguen los teléfonos a todas las partes y a todos los habitantes". En segundo lugar, habrá que ajustar las tarifas a los costes y, en tercer lugar, se deberá conseguir una garantía de la financiación del servicio universal.

El ministro señaló que Telefónica pierde dinero actualmente en el servicio a 30 provincias españolas, pérdidas que contrarresta con los ingresos de otras provincias. "Cuando exista la competencia habrá que equilibrar este problema", dijo Borrell. "Habrá que acabar con el actual sistema de subvenciones cruzadas territoriales", recalcó.