¿Quién le sisa el corazón a Ricardo Solfa?

El cantante y compositor Ricardo Solfa reapareció anoche en el Café del Foro (Malasaña), el mismo escenario donde el pasa do 29 de noviembre sufrió una crisis cardiaca mientras cantaba Corazón loco, precisamente. Ésa y otras canciones, como Navegar por navegar, volvieron a sonar tras la gran ovación que recibió al artista catalán en una sala llena a rebosar de fieles seguidores. No fue la única coincidencia: una de sus colaboradoras llegó a la sala, por azar, en el mismo taxi que llevó al artista al hospital aquel fatídico día. Cantábamos ayer.

No es que fuera Fray Luis de León, que Sisa nada dijo al subir al escenario. La madrugada se estrenaba y él, sin saludar con la palabra, se paseaba por las tablas. Pajarita azul y blanca, chaqueta negra de terciopelo y maletín de ejecutivo. No saludó, no hacía falta. Navegar por navegar fue el tema que sirvió para ello.Acompañado por sus dos guitarristas, Gaspar Payá y Miguel Herrero, el cantante fue desgranando temas, incluso el Hay mujeres de Joaquín Sabina. También cantó composiciones como Canciones contra el tiempo.

Antes, entre bastidores, el artista había contado su último hallazgo, compartido con su guitarrista Herrero: la canción Te has escapado de un libro, firmada por Augusto Algueró, tiene, en realidad, música de Enrique Granados y letra de un poeta belga, Moulain de la Chervez. Esta obra fue grabada en 1943 por los coros del Ejército Ruso con el propio Granados como director, asegura. Sisa está convencido de que es un plagio. Así lo dijo después ante el público.

Regreso aplaudido

El respetable, que abarrotaba la sala, aplaudió a rabiar al artista reaparecido, que anduvo parco en palabras y pródigo en músicas. No era, ni mucho menos, la vuelta de un enfermo, sino la de un cantante lleno de vida y de ganas de hacer muchas cosas.

A Solfa le sobra corazón. Para corroborar que lo suyo son las cosas del amor, su primera actuación tras la convalecencia se produjo el Día de los Enamorados en la sala Ambigú, de Valladolid. El público pucelano, puesto en pie, obligó al artista a hacer hasta siete bises.

Ayer, en el Foro, volvió a demostrar que está en plena forma. Muchos recordaban las declaraciones que había hecho, con buena dosis de sorna y humor, tres días después del accidente, desde la unidad de cuidados intensivos de la residencia La Paz: "Todo esto ha sido un montaje diseñado escrupulosamente por una multinacional discográfica para dar un impulso definitivo a mi carrera".

Sea lo que fuere, lo cierto es que ha vuelto a los escenarios con tantas ganas y tal fuerza que da la impresión de ser una auténtica reviviscencia. Ha vuelto a nacer, cosa a la que ya, por cierto, da la impresión de estar acostumbrado.

Algunos le llaman el rey de la transmigración: primero fue Jaume Sisa, cantautor galáctico y catalán nacido hace 45 años en Barcelona. Un día desapareció, pero surgió en Madrid un melancólico vocalista llamado Ricardo Solfa que se le parecía en todo físicamente y que cantaba boleros, pasodobles, habaneras, tangos y diversas músicas de boda y verbenas.

Y no acaban aquí sus criaturas; es prolífico como una coneja: el cantante firma sus composiciones con otros dos seudónimos, Armando Llamado y Ventura Mestres.

Éramos pocos y parió la abuela, porque se comenta que anda rondando de nuevo por ahí el original Jaume Sisa. Asimismo, dicen casi en secreto sus allegados que está a punto de irrumpir otro personaje de cuyo nombre no pueden acordarse. De todo lo cual se colige que Ricardo Solfa es muchos a la vez, y no está como una cabra.

Hay que tener en cuenta que el artista también ha trabajado en teatro con el grupo Dagoll Dagom, y que ha realizado incursiones en el cine de la mano de Basilio Martín Patino, Manuel Iborra y Luis García Beranga; con este último en su reciente película Todos a la cárcel.

La recuperación fue total, y a actuación de Ricardo Solfa hizo exclamar a más de uno de os que habían presenciado el espectáculo: "Esto es un recital de infarto"... dicho sea en el sentido eufórico, que no en el médico.

Ricardo Solfa vuelve a actuar hoy a las 23.30 horas en el Café del Foro (San Andrés, 36). Consumición mínima: 500 pesetas. A menudo las actuaciones comienzan a medianoche. Pero quien acuda a esa hora tendrá ya difícil encontrar un buen sitio para poder escuchar.