La sucesión de Teófilo Serrano abre otra crisis en el grupo socialista
La crisis abierta entre los socialistas madrileños se ha cobrado ya una víctima. La victoria de los renovadores en el reciente congreso regional para seleccionar a los delegados de la Federación Socialista Madrileña (FSM) en el 33º Congreso del PSOE se ha saldado con la decapitación de uno de sus líderes claros, el secretario general de la FSM, Teófilo Serrano.Serrano aguantará en este cargo hasta el congreso regional -que se quiere fijar en mayo-, pero dejará de inmediato su puesto de portavoz del PSOE en la Asamblea y, sobre todo, su escaño de senador socialista por esta Comunidad. La batalla está planteada.
Teófilo Serrano Beltrán, de 44 años y navarro de Tudela, es ingeniero de caminos y funcionario en excedencia del Ministerio de Obras Públicas y Transportes, adonde regresará en la segunda semana del mes de abril. Antes tiene que resolver su situación en el Senado, donde consiguió uno de los escaños por designación de la Comunidad autónoma y de donde cobra mensualmente una nómina de 650.066 pesetas.
El secretario general de la FSM, guerrista cuando fue elegido para el cargo con el apoyo del presidente José Acosta y renovador al final de su mandato con el respaldo de Joaquín Leguina, abandonará en esas mismas fechas del mes de abril el cargo de portavoz del Grupo Parlamentario Socialista en la Asamblea.
El retiro de Serrano, cansado de batallas internas en la FSM, pero también harto de no poder ejercer desde su puesto una labor de coordinación entre las políticas del PSOE en la Comunidad y el Ayuntamiento, provoca inevitablemente expectativas entre muchos diputados de este partido y, por tanto, recelos.
El portavoz del Gobierno regional, Jaime Lissavetzky, aseguró ayer que el cargo se cubrirá interinamente por parte de la portavoz adjunta, Dolores Garcia Hierro, hasta que se celebre el próximo congreso de la FSM y se defina la reestructuración. El consejero de Cooperación, Virgilio Cano, explicó que el hueco que deja Serrano habría que llenarlo cuanto antes.
Nuevo portavoz
Cano barajó, incluso, dos posibilidades para. ocupar esa vacante. Por un lado, que uno de los tres consejeros que además son diputados (Agapito Ramos, Ramón Espinar y Jaime Lissavetzky) renuncie a su Consejería (Presidencia, Hacienda o Educación y Cultura) y se dedique unos cuantos meses a la función de portavoz. La otra alternativa es designar a alguno de los 38 diputados restantes. Cano avanzó un nombre: Javier Ledesma. Ledesma fue nombrado ayer por el juez como uno de los cuatro miembros de la nueva junta gestora de PSV.
Diputados acostistas indicaron ayer que no pondrían problemas a García Hierro como portavoz unos meses, pero aseguraron que no la aceptarían nunca tras el próximo congreso,
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