Arantxa y Conchita pasan la primera ronda

Los dos finalistas del útimo torneo del año 1993, la Copa Grand Slam, no empezaron bien la temporada. El alemán Michael Stich, segundo cabeza de serie, y el checo Petr Korda, octavo, fueron ayer eliminados en la primera ronda del Open de Australia de tenis, que se disputa en Flinders Park, Melbourne. En cambio, las jugadoras españolas Arantxa Sánchez y Conchita Martínez pasaron a la segunda ronda con partidos de signo muy distinto. Arantxa (2ª cabeza de serie) se impuso a la eslovaca Karina Habsudova (106ª de la WTA) por 6-1, 6-3. Conchita (3ª) venció a la bielorrusa Natalia Zvereva por 5-7, 6-4, 6-3.

Las previsiones no se rompieron ayer en lo referente a la participación española en Melbourne. Conchita Martínez pasó serios problemas para derrotar a Zvereva, mientras que Arantxa precisó solamente de 74 minutos para eliminar a Habsudova. La manga que cedió la aragonesa fue la única que concedieron las cabezas de serie femeninas que ayer entraron en competición. Sin embargo, Virginia Ruano y Javier Sánchez Vicario tampoco lograron romper los pronósticos. La primera perdió frente a la argentina Florencia Labat por 6-3, 6-1 y el segundo fue eliminado por el sueco Stefan Edberg, 40 cabeza de serie, por 6-3, 6-0, 6-3.El torneo masculino, pues, se queda con Emilio Sánchez como único español. El mayor de la dinastía barcelonesa abrirá hoy la pista dos enfrentándose al surafricano Grant Stafford, el 71º de la clasificación mundial. Horas más tarde, en. la misma pista, Martínez jugará con la norteamericana Patty Fendick, 27ª del mundo. Arantxa no volverá a competir hasta mañana. Su próxima rival será la jugadora de Taipéi Shi-ting Wang, 30ª de la WTA.

Arantxa reconoció ayer de nuevo que Graf es su rival de referencia en este Open de Australia. "Es la número uno y está jugando a un gran nivel. Pero también yo me siento en perfectas condiciones. El torneo es largo y queda mucho camino por recorrer", dijo. La española, que ha alcanzado al menos las semifinales en 10 de los 24 torneos del Grand Slam que lleva disputados, se mostró esperanzada en repetir su éxito de Roland Garros en 1989. "Cuando gané allí era muy joven, tenía sólo 17 años", explicó. "Definitivamente, creo que puedo ganar algún otro Grand Slam. Cada torneo es diferente. No tengo prisa".

Ayer, varias jugadoras precoces ganaron, cómodamente sus partidos. Mary Pierce, de 19 años, y Magdalena Maleeva, de 181 fueron dos de ellas. Pam Shriver, presidenta de la WTA, se refirió a ello y señaló que las reglas que permiten la entrada en el circuito mundial a niñas de 14 años deberían ser revisadas. "Creo que sería importante abrirles los ojos y hacerles ver que la mayoría de ellas acabarán demasiado pronto sus carreras" explicó.