El humor negro de Alfonso Armada hurga la memoria en Cuarta Pared
El autor y director estrena hoy 'Sin maldita esperanza'
La compañía Koyaanisqatsi no piensa en el éxito cuando aborda un nuevo montaje: "Si lo hiciéramos nos saldría otra cosa" dice su autor y director, Alfonso Armada. "Hoy la gente quiere pura evasión, cuando va a ver un espectáculoquiere olvido, y nuestro teatro pretende lo contrario: trabajar sobre la memoria y luchar contra el olvido". Con esos presupuestos y la radicalidad y el humor negro del teatro de este autor, Sin maldita esperanza se estrena hoy en la sala Cuarta Pared.
Koyaanisqatsi significa "vida fuera de equilibrio" en la lengua de los indios hopi de Arizona. El nombre ya existía cuando Armada, de 35 años, llegó a la compañía: "Sabemos que es un nombre imposible, anticomercial, absurdo y que mosquea porque no se sabe qué significa ni como sé pronuncia, pero es enigmático, y como el teatro cada vez es más misterioso y de catacumbas, creo que viene muy bien para los tiempos que corren".Armada ha pasado por los tres oficios más relevantes de la profesión teatral, incluida la de actor. Tras esas experiencias descubrió su fascinación por la escritura (descarnada, radical y de humor negro),y-la dirección, y de ahí no. se mueve. Para él lo fundamental del teatro es el actor y todo lo demás son elementos al servicio del cómico.
Sin maldita esperanza está compuesta de dos monólogos, un prólogo y un epílogo. Los dos actores, Anne Serrano Y Julián L. Montero, sólo están juntos al principio y al final de la obra, y en medio cuentan dos. historias de soledad. En la escritura de los textos ha influido "otra" profesión de Armada: redactor de noticias internacionales, oficio que le ha llevado en tres ocasiones a la Bosnia en guerra, hecho que le ha afectado: "Estar en Sarajevo te cambia la vida".
Su teatro, radical, tanto plástica como políticamente, es de pura denuncia: "Sé que la gente dice que el papel del mundo del arte no es dar soluciones, pero luego dejas a los políticos y pasa lo que pasa". Un teatro adscrito al denominado alternativo, que él dice que está contra la realidad circundante.
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