Los negros de Suráfrica participan por primera vez en la dirección del país

El último bastión del dominio de la minoría blanca en el continente africano se derrumbó ayer en Suráfrica a las 10.24. A esa hora, 19 partidos políticos multírraciales constituían en Ciudad del Cabo el llamado Consejo Ejecutivo de Transición (TEC), que supervisará los destinos del país hasta las elecciones generales del próximo 27 de abril. Ese día, los ciudadanos negros podrán, con su voto, ser dueños de su destino político.

Los miembros del Consejo Ejecutivo de Transición entraron lentamente en el edificio del Good Hope Theatre de Ciudad del Cabo. Era la mismo emplazamiento donde, en abril de 1652, los primeros colonos blancos pusieron pie en tierras surafricanas. Y era ese mismo edificio de tejado acristalado el que albergó, hasta principios de este año, el llamado Consejo Presidencial, creado para salvarguardar el poder blanco después de que, en 1984, los indios y los mestizos (que no los negros) entraran en el Parlamento.El Consejo presidencial fue abolido a principios de este año, pero su sede, un edificio de moquetas azules y paneles de madera clara, fue ayer el mudo testigo del final del dominio blanco. Cyril Ramapliosa, secretario general del Congreso Nacional Africano (ACN), lo expresó con estas palabras: "Nuestra entrada aquí significa que hemos desinfectado esta cámara de los viejos malos olores. Significa que el pueblo se ha apropiado de lo que es suyo".

El Consejo Ejecutivo de Transición es la culminación de tres años. de negociaciones, que comenzaron después de que Frederik de Klerk, al frente del Partido Nacional, el mismo que en 1948 inventó el apartheid en un intento de asentar el dominio sobre la mayoritaria población negra, comenzara el desmantelamiento de un régimen cada vez más sobrepasado por la historia y socavado por las presiones internacionales y las movilizaciones internas.

El TEC está compuesto por 19 grupos blancos y negros, entre los que destaca el Congreso Nacional Africano: son todos los partidos que han querido adherirse al proceso de transición. Frente a ellos emerge la llamada Alianza para la Libertad, una coalición un tanto laxa que aglutina a conservadores blancos y negros: desde el ultraderechista Frente de Unidad Afrikáner hasta el Partido para la Libertad Inkhata, que preside el líder zulú Mangosuthu Buthelezi. Todos ellos abandonaron las negociaciones hace cinco meses para exigir más poder en los homelands.

Si bien el actual Gobierno de

Frederik de Klerk de mayoría blanca (tan sólo cuenta con dos ministros mestizos *y uno indio nombrados el pasado mes de febrero) se mantendrá en el poder hasta las elecciones, el TEC tendrá capacidad consultiva sobre los temas de defensa, seguridad, finanzas y asuntos exteriores. De hecho, la población negra toma parte por primera vez en las decisiones de gobierno.

Uno de los artífices de la transición surafricana, el líder del Congreso Nacional Africano, Nelson Mandela, siguió a distancia la constitución del TEC. Mandela, que. se encuentra en Oslo, donde, el próximo viernes, compartirá el premio Nobel de la Paz con el presidente De Klerk, declaró: "El camino hacia la democracia en Suráfrica es imparable. Esta es una victoria para todo los pueblos surafricanos sin excepción".

El país tendrá su recompensa internacional: el levantamiento del embargo petrolero y la concesión de un préstamo de 850 millones de dólares del Fondo Monetario Internacional.

A la misma hora que se ponía en marcha el Consejo, una treintena de ultraderechistas blancos armados con rifles ocuparon en Pretoria el Fuerte Schanskop, una construcción militar del siglo XIXI- ahora convertida en museo. Al mando de todos ellos se encuentra Willem Ratte, un antiguo comandante del Ejército surafricano. La policía trataba ayer de convencer a los ocupantes de que abandonaran el lugar. "Se trata de un símbolo de nuestra resistencia frente al Consejo de Transición" afirmó uno de los encerrados. "Estamos preparados para morir". Además, una bomba explotó en una tienda cerca de Johanesburgo y causó fuertes daños materiales.