El 'impuesto' de la UEFA

La Unión de Asociaciones Europeas de Fútbol (UEFA), el organismo que controla el fútbol continental, ha cobrado en el plazo del último año 150 millones de pesetas en multas a los clubes que disputan sus tres competiciones. Estos pingües beneficios provienen de sanciones impuestas a su libre albedrío y se engloban en tres grandes apartados: lanzamiento de objetos a los campos, conducta incorrecta de los equipos y de los espectadores. El Atlético de Madrid ha sido el mejor colaborador de esta partida del presupuesto de la UEFA, con cerca de 23 millones de pesetas.

La UEFA recauda una media de 30 millones por reunión de su comisión de control y disciplina. En un año suele reunirse seis veces, tras las respectivas jornadas de ida y vuelta que fórman las eliminatorias continentales de clubes, y en el último ejercicio el récord recaudatorio quedó establecido tras los cuartos de final de la pasada temporada, con 44.082.000 pesetas. El presente estudio de los ingresos económicos por multas de la UEFA se ha hecho desde la tercera eliminatoria de la temporada pasada, 1992-1993 -en que las multas ascendieron a 19.390.500 pesetas-, hasta la segunda de la actual, 1993-1994 -que da la segunda cifra máxima 34.875.000- Las restantes cantidades por eliminatoria fueron 26.830.000 pesetas en la primera de la presente temporada y 21.948.000 en las semifinales de la anterior. Incluso en una eliminatoria previa de la temporada actual, con sólo algunos partidos con equipos de bajo nivel, la UEFA cobró casi dos millones de pesetas. Aunque sean peque flas cantidades, desde 500 o 1000 francos suizos -46.500 o 93.000 pesetas- el rosario de multas nunca falta.

Las federaciones nacionales respectivas sólo reciben las sanciones de sus equipos, pero no las actas globales de cada eliminatoria.

Libre albedrío

El Atlético de Madrid, por amplio margen, es el equipo más castigado por la UEFA. En cinco sanciones lleva 22.785.000 pesetas. La más fuerte, de 9.300.000, tras la eliminación el año pasado en Parma en semifinales de la Recopa. Ha sido la segunda más dura de este año. Pero también le multaron con 6.975.090 por "conducta gravemente incorrecta del equipo durante y después del partido" jugado contra el Olympiakos en Atenas en cuartos de final. Aquel encuentro fue el más lucrativo para la UEFA, pues el conjunto griego se llevó el primer premio de las multas: 12.555.000 pesetas por la misma conducta gravemente incorrecta del equipo, como el Atlético, más el lanzamiento de objetos al terreno de juego, siendo reincidente.El libre albedrío en las sanciones llega a extremos insólitos. Los informes arbitrales y de los delegados de la UEFA que viajan con generosas dietas dan lugar a variaciones sustanciales.

Pueden ir, normalmente, desde más de cuatro millones de pese tas hasta menos de 100.000. Y también por decisión unilateral -de la UEFA sólo pueden recurrirse si superan las 372.000 pese tas, 4.000 francos suizos. Dicho recurso también cuesta dinero, pero casi siempre se pierde. Suele ser inútil, según dicen clubes implicados.

Al Real Madrid le multaron con 1.860.000 pesetas por lanzamiento de bengalas y conducta incorrecta de sus seguidores tras el partido de vuelta de la anterior Copa de la UEFA en que cayó eliminado ante el Paris- Saint-Germain, en París. En la actual Recopa se le ha multado con 558.000 pesetas por unos cuantos lanzamientos menos -al parecer-, de sus ultrasur en Lugano. Más caros, 930.000 pesetas, le costaron al Deportivo de La Coruña los objetos tirados en Riazor en su primera eliminatoria de la Copa de la UEFA ante el Aalborg danés. Los jugadores del Tenerife, por último, se portaron un poco peor, en una curiosa valoración -multa de 744.000 pesetas-, en su visita esta temporada al Olymplakos, que al Auxerre -651.000- y en todo caso también peor que el Valencia tras el siete sufrido en Karlsruhe -558.000- La cuestión es multar.