Ningún gran Ayuntamiento de la región tiene en plantilla el 2% de disminuidos que obliga la ley

El Ayuntamiento de Alcorcón cubrirá las 15 plazas que atienden las llamadas de urgencias de bomberos y Policía Municipal con personas que tengan minusvalías físi cas. Esos 15 puestos, más los dos con que cuenta en la actualidad cubiertos por disminuidos psíquicos, superarán el 2% del total de una plantilla compuesta por más de 800 trabajadores. Será el primer Ayun tamiento de Madrid con más de 50.000 habitantes que cumpla la Uy de Integración Social de Minusválidos (Lismi), que obliga a las administraciones a reservar un 2% de las plazas para personas minusválidas.

Los 15 empleados nuevos que tendrá el Ayuntamiento de Alcorcón el próximo año serán los cargados de dar en servicio durante las 24 horas del día todos los días del año. La incorporación de estas personas a dar respuesta a las llamadas dirigidas al 092 supondrá incrementar en un 10% el número de agentes de Policía Municipal que prestan su servicio en la calle y en el mismo porcentaje la cantidad de bomberos que podrían realizar tareas de intervención en siniestros u otras similares.Así, el Ayuntamiento de Alcorcón será uno de los primer s en cumplir el artículo 381 de la Lismi, aprobada el 7 de abril de 1982, y que expone: "Se establece una cuota no inferior al 2% reservada a los minusválidos en aquellas empresas públicas y privadas que empleen un número de trabajadores fijos que excedan de 50".

Ninguno de los ayuntamientos con más de 50.000 habitantes consultados por EL PAIS cumple esta normativa. El que más cerca se queda es el de Getafe, con 12 empleados minusválidos, que suponen un 0,9% de la plantilla municipal, compuesta por 1.300 trabajadores. Le sigue Alcobendas, con el 0,7%; Torrejón de Ardoz, con el 0,6%; Alcalá de Henares, que tiene el 0,2% de su plantilla cubierta por minusválidos; Móstoles, con el 0,1%, y Leganés, que no tiene ni un solo trabajador con alguna minusvalía.

En el caso del Ayuntamiento de Madrid, con más de 20.000 empleados, se sabe que 22 de ellos reciben ayudas especiales para el transporte. Eso supondría un 0,1% del total del personal.

Un estudio sobre el grado de cumplimiento de la Lismi, elaborado por la Confederación Coordinadora Estatal de Minusválidos Físicos de España, expone que la gran mayoría de las empresas con trabajadores minusválidos valora el rendimiento de éstos igual al del resto de los trabajadores.

Ordenes claras

El citado informe no ofrece datos de contratación de minusválidos, pero por lo que se refiere a la empresa pública en general sólo el 12,6% de las que contestaron cumplía con el 2%.Para el concejal de Régimen Interior de Alcorcón, José Ángel Gómez; Chamorro, la integración social de los minusválidos "es algo que hay que hacer a todos los niveles, no sólo suprimiendo barreras arquitectónicas, sino también con puestos de trabajo".

Hasta ahora, el consistorio alcorconero sólo contaba con dos personas con minusvalías: Carmen García, de 20 años, y José Sanz, de 22. Ambos llevan casi dos años en el consistorio y en la próxima renovación les harán fijos. Son disminuidos psíquicos, aunque no lo demuestran en su quehacer diario dado el grado de satisfacción de sus compañeros.

El territorio de Carmen es la sala de fotocopias. Susana, compañera de aquélla, siempre está con ella y la echa un cable cuando hay problemas: "Cada 15 días se nos rompe la fotocopiadora. No falla", dice. Carmen está contenta con lo que hace y asegura que "todos se portan bien conmigo".

José tiene más contacto con los concejales y el resto de mandos municipales. Es conserje y lleva papeles a todos los rincones del Ayuntamiento. Dos años son más que suficientes para saber que es bueno tener amigos en todas las formaciones políticas. Por eso, cuando se le pregunta por algún concejal con el que se lleve mejor, contesta sin pensar: "Me caen todos igual de bien". Gómez Chamorro asegura que "no hay ninguna queja de ellos. Sólo necesitan órdenes claras".