Cruyff trata de encontrar un 'once' fijo en el Barcelona

, La política pública del palo y la zanahoria utilizada por Johan Cruyff con sus jugadores tomó ayer un nuevo impulso. El técnico del Barcelona adelantó un regreso a los antiguos usos. "Hay que volver a lo primitivo", dijo; "si se funde una bombilla, se cambia". O sea: se trata de encontrar un once fijo. Esta noción coincide con el deseo de los jugadores, que consideran que es necesario acabar con las probaturas tácticas y volver al sistema que les dio personalidad.

En vísperas del partido de la Copa de Europa frente al Austria, en Viena (3-0 en el Camp Nou), Cruyff anunció un aparcamiento de las decisiones anunciadas tras el 4-3 ante el Atlético. Piensa que seguir hablando de lo del estadio Calderón crearía una psicosis que perturbaría la concentración del equipo.

El encuentro frente al Austria es afrontado como un paréntesis en la Liga, según Cruyff. "Lo del sábado está aparcado. Es una cuestión de casettes. Cuando llega otra competición, hay que cambiar el casette. No hay que mezclar la Liga con la Copa de Europa".

Cruyff profundizó en su teoría. Una derrota en la Liga es asumible, pero una eliminación europea sería catastrófica. "No quiero pensar en el Atlético porque ello supondría tomar decisiones y sólo se hablaría de eso. Aparcar no es olvidar [el domingo aseguró que tenía los nombres de los culpables azulgrana], pero ahora no quiero pensar en la Liga ni en otras cosas", afirmó; "no quiero que se hable de ello. Sólo, de la Copa. Que se recuerde la experiencia, pero que no influya en Viena".

Todos los disponibles

Esta idea se confirma con su decisión de llevarse a los 18 jugadores disponibles, incluidos óscar y Angoy, mientras Guardiola cumple su sanción por acumulación de amonestaciones. Así, viajan los cuatro extranjeros, aunque sólo tres se podrán vestir de corto. El descartado podría ser esta vez Laudrup: Stoichkov no jugó en Madrid, Romario marcó tres goles, aunque inútiles, y Koeman no podrá jugar el domingo frente al Racing de Santander por estar suspendido.

La precaución ante el Austria se ha acrecentado tras los últimos partidos de la Liga austriaca, resueltos por el cuadro vienés con goleadas. Cruyff reconoció la suerte tenida en la ida y avisó: "Nos dio un susto y ahora jugará al límite. Saldrá como el Atlético en el segundo tiempo. Será muy peligroso".

En el vestuario, acostumbrado a las tácticas motivadoras del entrenador holandés, la creencia privada entre algunos jugadores es que Cruyff mantiene una postura de cara a la galería para dar titulares a los periódicos. También opinan que parte de la culpa del desastre del sábado pasado debe ser asumida por el propio técnico en función de sus cambios tácticos durante el encuentro.