Encuentros previos en la oscuridad

Antes de que se llegara a la cena del miércoles en La Moncloa entre Felipe González y José María Aznar hubo dos encuentros secretos entre dirigentes del PSOE y del Partido Popular.Tres días antes de la fecha de la reunión en la cumbre, celebraron un almuerzo el secretario general del PP, Francisco Álvarez-Cascos; el vicesecretario general, Mariano Rajoy, y Rodolfo Martín Villa, miembro del comité ejecutivo. Por parte de los socialistas acudieron el secretario de Organización, Txiki Benegas; Francisco Fernández Marugán, secretario de Finanzas, y Abel Caballero, responsable de Política Institucional de la ejecutiva.

En esta reunión, organizada a instancias del PSOE, se planteó por primera vez durante esta legislatura la conveniencia de establecer algún tipo de relación habitual e institucionalizada entre los dos partidos.

El pasado martes, un día antes de la cena en La Moncloa, Abel Caballero y el alcalde de La Coruña, Francisco Vázquez, presidente de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), se reunieron con los populares Mariano Rajoy y el alcalde de Madrid, José María Álvarez del Manzano. El asunto principal de la conversación fue la posibilidad de llegar a un acuerdo entre los dos grandes partidos sobre la política municipal y la rebelión de alcaldes de ambos partidos contra la insuficiencia de la financiación local.

Dirigentes del PSOE señalan que "hubo un enfoque coincidente con el Partido Popular sobre las posibles soluciones a la situación de déficit que viven los ayuntamientos".

Posición única

El secretario general del PSOE, Felipe González, pidió el pasado miércoles en la ejecutiva de su partido la intervención de la dirección para que la reunión de la FEMP de la próxima semana transcurra con normalidad y con una posición única de los socialistas.

Asistentes a la ejecutiva señalan que González dio por sentado que no debía ser una sesión incendiaria contra el Gobierno, por la simple razón de que la mayoría de ese órgano la ostenta el PSOE.

Desde esta perspectiva, González no ve con buenos ojos el bloque formado por los alcaldes de las siete mayores ciudades, al considerarlo insolidario con respecto al resto de los municipios.

La ejecutiva del PSOE rechazó la demanda de los siete grandes ciudades para obtener la cesión del 5% del IRPF, aunque sí piensa promover de inmediato otras medidas, como la renegociación de la deduda municipal, reformas legislativas que se consideren adecuadas y la creación del Fondo de Cooperación Municipal, que arrastra un año de retraso.