"La Copa no puede ser obligatoria"

El holandés Hein Verbruggen, presidente de la Unión Ciclista Internacional (UCI), terció ayer de forma sorprendente en la polémica que enfrenta a los equipos españoles con Jean Marie Leblanc, director del Tour, organizador de varias pruebas de la Copa del Mundo, presidente de la asociación internacional de organizadores y miembro del Consejo Profesional de la UCI. Si los equipos españoles se niegan al plan Leblanc -según el cual participar en la Copa del Mundo sería obligatorio-, el propio Verbruggen, en entrevista concedida a EL PAÍS, desautoriza, con una visión pragmática, al propio Leblanc, sin por ello d r la razón a los españoles.Pregunta. ¿Se puede permitir el ciclismo mundial no contar con la participación activa del ciclismo español?

Respuesta. El ciclismo internacional sería más pobre, sí, pero puede vivir sin España. Es igual que la UCI, sobreviviría sin Hein Verbruggen; o el fútbol, seguiría existiendo sin el Barcelona. Nada ni nadie es imprescindible. Es decir: yo no veo el ciclismo sin la participación de los ciclistas de España. El ciclismo español es uno de los más importantes.

P. En el pulso que mantienen Leblanc y los equipos españoles, ¿dónde se sitúa la UCI?

R. Quiero dejarlo claro. Yo, como presidente de la Unión Ciclista Internacional, no estoy de acuerdo con las declaraciones de Leblanc después de la París-Tours. Creo que todos los corredores tienen el derecho a decidir por sí mismos si participan en una carrera o no. Es imposible que una organización pueda obligar a unos corredores a participar en su prueba. Me siento triste si los corredores, no quieren participar en la París-Tours o la París-Roubaix, pero no les puedo criticar, es su elección. Por eso nunca dije nada contra Greg LeMond, que basaba toda su temporada en el Tour y el mundial. Hay mucha inconsistencia en el ciclismo. No estoy de acuerdo con lo que dijo Leblanc, para nada. Pero lo entiendo. Lo respeto. Y es que los españoles hacen exactamente lo mismo. Ellos dicen a todas las organizaciones de su país que hay que invitar a todos los equipos españoles. Y si no, no participan. Así que hacen lo mismo que Leblanc, amenazar.

P. ¿Teme que el ciclismo español dé un paso adelante y, por ejemplo, organice una Vuelta paralela en 1995?

R. Una Vuelta a España paralela, sin el auspicio de la federación, como el mundial de ajedrez entre Kaspárov y Short, es una utopía, una fantasía imposible. ¿Qué podrían hacer los equipos españoles fuera de la UCI? Para obtener participación internacional necesitarían nuestro permiso, y si lo hicieran sólo con equipos españoles, seguirían necesitando el apoyo de la federación española, y esto nunca lo van a tener, o eso creo. Es una idea estúpida, vieja e imposible.

P. ¿El cambio de fechas de la Vuelta es la mejor salida?

R. Cuando hablamos sobre estos temas años atrás los directores de los equipos españoles estuvieron de acuerdo. También opinaban que el calendario no funcionaba. Dijeron que necesitaba cambios. Entre ellos estaba José Miguel Echávarri [director del Banesto]. Y ahora esa misma gente dice que no hay que tocar el calendario. Es bueno que la temporada se alargue, que el calendario abarque ocho meses. La situación actual es la peligrosa.