Crivillé y Pons se plantean seguir caminos separados

La unión entre Sito Pons y Alex Crivillé, el mejor matrimonio que ha tenido el motociclismo español desde los tiempos de Derbi y Jorge Martínez Aspar, está a punto de romperse. Durante el Gran Premio de Estados Unidos, disputado el pasado fin de semana, se confirmó que las relaciones entre el piloto y la escudería que dirige el ex campeón pasan por un momento crítico. Cada uno ha empezado a buscar su futuro sin contar con el otro.

"Hay tensión en el equipo", reconoció Crivillé después de la carrera, "y no está claro que continuemos juntos la temporada próxima". El motociclista de Seva ha retrasado la firma de la renovación mientras estudia diversas alternativas. Paralelamente, Pons ya ha negociado con el estadounidense John Kocinski. "Cada uno puede hacer lo que quiera", dijo el ex campeón mundial. "No me importa que negocie con otros pilotos, pero podría ser más discreto", fue la respuesta de Crivillé al enterarse de las reuniones del jefe casi delante de sus narices. Menos hablar entre ellos, parece que Pons y Crivillé negocian con todo el mundo. El divorcio ha sido progresivo. No existe un único culpable, una causa absoluta o un instante concreto del inicio de la ruptura.