La CEOE dice que no puede dar contrapartidas en el pacto
Las empresas no pueden dar contrapartidas en el pacto social. El vicepresidente primero de CEOE, Arturo Gil, dejaba claro ayer que la patronal tiene poco margen de maniobra y que la contención de los salarios pedida a los trabajadores se va a compensar así: "Con nada; con la inversión y el empleo del futuro". Ese criterio lo defenderá en la reunión convocada para mañana con el Gobierno y los sindicatos.El Ejecutivo se propone reconducir el diálogo y superar las dificultades surgidas en los últimos días. La críticas a los sindicatos del jefe de Gobierno, Felipe González, han causado perplejidad en los responsables de Economía y Trabajo encargados del diálogo social.
Esas declaraciones han provocado "efectos no deseados que crean dificultades" en el diálogo, según un alto cargo. A la CEOE, en cambio, no le han causado sorpresa las palabras de González. La junta directiva de la patronal analizó ayer las últimas propuestas del Gobierno y uno de sus máximos responsables, Juan Jiménez Aguilar, afirmaba que las empresas lo han dado ya todo" y citó la caída de beneficios, la desaparición de empresas y el incremento de cotizaciones.
La patronal tiene "un juicio muy diverso" de las diferentes ofertas del Ejecutivo. El pacto de rentas le parece "una propuesta sugerente" y también le gusta "la filosofía" de los documentos que recogen un recorte de las prestaciones por desempleo y el endurecimiento de las futuras pensiones. En cambio le parecen muy negativas las medidas para reactivar la economía que propone el Ejecutivo. CEOE sigue insistiendo en que estas últimas medidas deben ser objeto de un pacto político, o decididas por el Gobierno, y que no se incluyan en el acuerdo social. Ese argumento de la patronal atascó durante horas la última reunión del pacto social.
Los responsables de Trabajo quieren evitar que la sesión convocada para mañana se convierta en un nuevo fracaso. De prosperar su propuesta, se empezaría ya a discutir el pacto de rentas, la protección por desempleo y las grandes cifras macroeconómicas del próximo trienio, de forma que "el pacto no se asocie a la idea de que persigue tan sólo luchar contra el déficit público de l994".
El Gobierno prevé que se empiece a crear empleo neto en 1995, aunque no tiene ningún cálculo preciso ni sabe el aumento del PIB necesario para generar empleo. Por ello Trabajo propone analizar un escenario del empleo más amplio que el hasta ahora estudiado -1994- e incluir el inicio de la creación de empleo -1995 y 1996-. De esa forma intentarían dar respuesta a una de las principales peticiones de los sindicatos: un pacto por el empleo no se puede limitar a crear 11.000 puestos en 1094.
