El Deportivo ofrece un gran juego frente al campeón de Italia
El Deportivo europeo se presentó frente al Milan (0-0) plagado de nombres nuevos, pero sin ninguna voluntad de abandonar un estilo que le hizo tocar el cielo el ano pasado. Cada una de las nuevas incorporaciones blanquiazules que saltó ayer al estadio de Riazor repitió un papel que antes desempeñaron otros protagonistas. Donato, por ejemplo, hizo de Mauro Silva y Manjarín no se separó ni un ápice del guión que Arsenio entrega habitualmente a Bebeto. Pocas lecturas se pueden sacar de un encuentro como el de ayer, al que el Milan acudió con una especie de equipa B, pero el Deportivo demostró que su juego está anclado en bases muy sólidas. Le faltó un poco de puntería para alcanzar una victoria que buscó con más afán que los italianos.La avalancha de novedades, en plena pretemporada, causó la previsible descoordinación entre líneas en ambos equipos, aunque los dos trataron de aferrarse a su propia personalidad. Los blanquiazules no quisieron cometer los errores del Barcelona en Riazor y de salida dejaron que fuesen los italianos los que llevasen la iniciativa. El Deportivo comenzó a tomar el mando, sobre todo a partir del minuto 17. Desde ese momento, los coruñeses dominaron el juego con cierta autoridad, e incluso encerraron a sus rivales en los primeros minutos de la segunda parte.