600.000 muertos por la guerra civil en Sudán, según Intermón

La guerra entre el norte y el sur de Sudán se ha cobrado más de 600.000 vidas y ha obligado al desplazamiento de cinco millones de personas, 3,5 millones de ellas en el sur, desde que, en 1983, se creó el movimiento guerrillero Ejército Popular para la Liberación de Sudán (APLS). La escisión de la guerrilla por disputas de liderazgo y la intención del Gobierno de Jartum de imponer la ley islámica a un sur de mayoría cristiana y animista marcan un conflicto que ha derivado en una catástrofe humanitaria, según la organización humanitaria Intermón.A los cinco millones de desplazados sudaneses hay que añadir más de 700.000 refugiados de Zaire, Uganda, Kenia y Etiopía que se hacinan en los campamentos más seguros de Mundri, Maridi y Yei, cerca de la frontera con Zaire. Según Santiago Martínez, adjunto de comunicación de Intermón, que acaba de regresar de Sudán, cada uno de estos campamentos alberga a unas 50.000 personas que han huido de las zonas más conflictivas del Alto Nilo o del llamado, triángulo de la muerte, formado en torno a las localidades de Ayod, Waat y Kongor, en el centro del país, donde se enfrentan las dos facciones de la guerrilla. La escisión se produjo en septiembre de 1991, cuando Riak Mazar se separó del fundador y hasta entonces líder indiscutible del APLS, John Garang.

Presionado por la comunidad internacional, el Gobierno no ha vuelto a bombardear el sur desde 1992, pero ha aprovechado las divergencias internas del ALPS para organizar un hostigamiento desde las zonas controladas por la facción disidente de Riak en Kongor y en el Alto Nilo.

Los 12.000 efectivos de los dos grupos guerrilleros, según el representante de Intermón, sólo cuentan con armas ligeras y con la ayuda de los, países del sur, desde donde importan gasolina y productos de primera necesidad, y de las organizaciones humanitarias que colaboran con la administración de la guerrilla en la asignación de tierras a las familias sin recursos, la rehabilitación de infraestructuras, distribución de semillas, ropa y medicinas y vacunación de ganado.