Los diputados catalanes piden a Solchaga mas protagonismo

Diputados del PSC en el Congreso pedirán al nuevo presidente de su grupo parlamentario, Carlos Solchaga, que elimine las trabas que, a su juicio, ponía el anterior presidente, el guerrista Eduardo Martín Toval, al lucimiento del trabajo de los socialistas catalanes en la Cámara.Parlamentarios del PSC responsabilizan a Martín Toval de haber puesto sordina a sus iniciativas con el pretexto de facilitar acuerdos con los nacionalistas catalanes, circunstancia que habría ayudado a los diputados de CiU a labrarse una imagen de únicos representantes de Cataluña en el Congreso. Otros socialistas catalanes con escaño no son tan beligerantes: aseguran que Martín Toval no les marginó en la Cámara, aunque subrayan que tampoco movió un dedo para que su labor colectiva destacase.

Martín Toval, diputado por Barcelona y uno de los escasos guerristas que hay en las filas del socialismo catalán, "actuó siempre en el Congreso como si no fuese del PSC", coinciden varios diputados de ese partido. Algunos de ellos hacen votos para que el cese de Toval como presidente del grupo socialista signifique el fin de Ias acciones de difuminación" de su trabajo, así como de los impedimentos que los socialistas catalanes encontraron en anteriores legislaturas para proyectar una imagen propia.

Menos críticos

Otros diputados del PSC, sin embargo, no son tan radicales al enjuiciar a Martín Toval. "Es cierto", señala uno de ellos, "que muchas de nuestras iniciativas legislativas, al ser vehiculadas a través del grupo socialista, no han trascendido como iniciativas catalanas, pero no creo que fuera Martín Toval el único responsable de ello; más bien me inclino a pensar que todo esto ha sido fruto del propio sistema de funcionamiento del grupo".El PSC perdió su grupo parlamentario propio en 1982, a raíz de una reforma del reglamento de la Cámara pactada por UCD y el PSOE. Hoy, pese a haber renunciado a recuperar en esta legislatura un grupo parlamentario autónomo, los socialistas catalanes pretenden acentuar el perfil colectivo de sus diputados y senadores para combatir la idea de que los miembros de CiU son los únicos valedores de Cataluña.