El Oviedo da la vuelta al marcador ante el Sporting
Una reacción racial en el segundo tiempo permitió al Oviedo darle la vuelta a un partido que, hasta el descanso, había puesto al descubierto todos sus males: falta de confianza, desorientación e incapacidad para superar a un rival bien armado. El estado de necesidad ovetense se tradujo en 15 minutos vibrantes, dos goles de Carlos y un par de cañonazos que se fueron por poco del hombre que comandó la remontada azul: Armando.El Sporting había jugado hasta entonces con una comodidad difícilmente explicable en un partido de rivalidad. A ello contribuyó el gol tempranero de Abelardo, el primero que consigue en el Carlos Tartiere desde la vuelta del Oviedo a Primera, favorecido por un fallo de Viti en la salida. El Sporting pudo rematar a un rival totalmente perdido, pero los contragolpes de Manjarín y Juanele no fueron bien culminados.
El Oviedo agradeció el descanso como un boxeador tocado la campana y tocó a rebato en el segundo tiempo. Metió el Sporting en su área y en 10 minutos le dio la vuelta al marcador con tal despliegue de energía que convirtió su campo en un escenario electrizante. A partir de ahí, los dos equipos ofrecieron los mejores momentos de rivalidad de los últimos años. García Cuervo, que tuvo que jugar en contra del resultado por primera vez desde su vuelta al banquillo gijonés, lo intentó todo y sus hombres volvieron a tener oportunidades, pero la experiencia ovetense se impuso una vez más y sumó un nuevo éxito a la estadística de los partidos de rivalidad asturiana.
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