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LA VIDA BAJO 220.000 VOLTIOS

Un municipio paraliza las obras de un nuevo tendido para proteger a sus niños

Juan Carlos Sanz

"Nos tendremos que atar a las torres antes de que den la corriente", augura Luis Gregorio Díaz Vilches, alcalde socialista de Camarma de Esteruelas (2.000 habitantes). Iberdrola acaba de tender una línea de alta tensión en las imnediaciones de la escuela del municipio.

Camarma es un municipio cercano a Alcalá de Henares (36 kilómetros al este de la capital) que quiere crecer y ha previsto su desarrollo urbanístico. Las torres ya se han erigido, aunque los cables aún no se han tensado. El pasado día 10, el pleno del Ayuntamiento decidió paralizar las obras de Iberdrola. Los munícipes creen que la línea eléctrica pasa demasido cerca -menos de 200 metros- del colegio público Federico García Lorca, donde estudian 220 alumnos, y sobre terreno que será urbanizable."Si un promotor me pide una licencia de obras, con la ley en la mano se la tendré que conceder, para que viva gente bajo la línea de alta tensión", explica el alcalde, quien asegura que ha solicitado el auxilio de la Guardia Civil para paralizar las obras de Iberdrola. Los trabajos de la compañía cuentan con todas las bendiciones oficiales.

"Vamos a interponer una querella por un delito contra la salud pública", advierte el regidor, quien reconoce que su corporación no se preocupó cuando el proyecto de línea eléctrica salió a información pública. "Creemos que existe un riesgo para la salud y no vamos a consentirlo", argumenta Díaz Vilches, mientras esgrime la información de la asociación ALAT.

No entiende que, cuando otros colectivos vecinales exigen que se retiren los cables de sus viviendas, se imponga una línea de nueva construcción cerca de un centro escolar, y en un área que se ha reservado para el desarrollo del municipio.

Con total certeza

El Ayuntamiento de Camarma también quiere saber la respuesta a lía pregunta que todos se hacen sobre las líneas de alta tensión. Pero es el primero que ha dejado constancia de su inquietud en un acta de sesiones: "Instruir expediente ante la autoridad judicial solicitando amparo mediante orden de paralización [de la construcción de la línea eléctrica] en tanto no se acredite con total certeza que ( ... ) no afecta a los habitantes del municipio, y de forma especial, a las instalaciones escolares". Ni la compañía eléctrica Iberdrola ni la Dirección de Industria de la Comunidad tenían constancia de la rebelión eléctrica de Camarma cuando fueron consultadas por este periódico.

El pasado mes de abril, los tres grupos políticos de la Asamblea de Madrid -Partido Popular, PSOE e Izquierda Unida- votaron un acuerdo para reclamar al Gobierno de la Comunidad un mapa de la contaminación electromagnética en la Comunidad y de sus riesgos medioambientales. Debe estar ultimado antes de que acabe el año.

El Parlamento autónomo también ha apoyado la continuación (de los proyectos de eliminación de los tendidos aéreos -aunque en 1993 la Comunidad sólo ha presupuestado 25 millones de pesetas para este fin- y la creación de pasillos eléctricos alejados de las zonas residenciales, precisamente cuando los principales municipios madrileños se aprestan a revisar sus planes urbanísticos.

La Comunidad Europea auspicia también el programa COST, de estudio de los efectos biomédicos de los campos electromagnéticos. El campus tecnológico y científico previsto en la Universidad de Alcalá de Henares aspira a acoger la sede de este programa de investigación.

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Sobre la firma

Juan Carlos Sanz
Es el corresponsal para el Magreb. Antes lo fue en Jerusalén durante siete años y, previamente, ejerció como jefe de Internacional. En 20 años como enviado de EL PAÍS ha cubierto conflictos en los Balcanes, Irak y Turquía, entre otros destinos. Es licenciado en Derecho por la Universidad de Zaragoza y máster en Periodismo por la Autónoma de Madrid.

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