La derecha francesa impone su ley y limita el acceso a la nacionalidad
La Asamblea Nacional aprobó en la noche del pasado jueves el proyecto de ley sobre la reforma del Código de la Nacionalidad, que limita el acceso a la ciudadanía francesa a los hijos de inmigrantes. En su primera votación sobre un proyecto de ley desde su constitución tras las elecciones legislativas del pasado marzo, la nueva Cámara reflejó la aplastante mayoría de la coalición de centro-derecha. Un total de 476 diputados apoyaron el texto defendido por el Gobierno del gaullista Edouard Balladur, que fue rechazado por 88 socialistas y comunistas.La izquierda denunció el texto como "un atentado a la tradición francesa del derecho de suelo" y "un paso adelante en el establecimiento de dos categorías de franceses". Dirigiéndose a los diputados de la mayoría, el socialista Jean Yves le Déaut afirmó: "Ustedes acaban de crear una grave discriminación entre los niños que han nacido y viven juntos en Francia: los hijos de franceses son franceses de oficio; los hijos de extranjeros tienen que pedirlo". "Ustedes", añadió, "están dando una dimensión genética a la nacionalidad francesa, y eso es un primer elemento de apartheid".
El nuevo Código de la Nacionalidad establece que, en contra de lo que ocurría hasta ahora, los hijos de inmigrantes nacidos en territorio francés ya no son automáticamente franceses al llegar a la mayoría de edad.
A partir de los 16 años de edad tienen que hacer una petición formal y deben satisfacer ciertos requisitos, entre ellos haber vivido en Francia en el último lustro y no haber cometido ningún delito. Este texto dificulta asimismo la concesión de la nacionalidad francesa por matrimonio. La persona que se case con un francés o una francesa no podrá solicitar la nacionalidad hasta haber pasado dos años de "vida conyugal plena". Se pretende con ello evitar los matrimonios de conveniencia.
Los analistas sostenían ayer la tesis de que, al comenzar su tarea legislativa con este texto, Balladur ha enviado un mensaje a los sectores más derechistas del electorado de la coalición gubernamental.
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