Seles se recupera de la agresión en una clínica de Colorado
Monica Seles, de 19 años, la tenista serbia que sufrió una agresión durante el pasado torneo de Hamburgo (Alemania), se encuentra internada en una clínica privada de Vail, en Colorado, para recuperarse. "No hay comentarios ni siquiera si ella está aquí o no está, porque sobre la responsabilidad médica no podemos facilitar ninguna información", señaló Lyon Steadman, gerente de la clínica Steadman Hawkins, en el centro médico de esta estación de esquí, una de las más lujosas de Estados Unidos. Vail es visitada por numerosas celebridades.Sin embargo, se ha conocido que Monica Seles se encuentra en la clínica. Llegó la noche del domingo a Denver, la capital del estado de Colorado, en un avión privado procedente de Hamburgo y rodeada de fuertes medidas de seguridad. La tenista bajó del avión vestida de forma deportiva y sin ayuda, aunque acompaña da por un hombre y una mujer que no pudieron ser identificados.
El misterio que rodea a la jugadora es total, pues ni en ella ni ninguno de sus acompañantes quisieron hacer declaraciones Tampoco se ha sabido por qué Seles no se quedó en Europa. Ella y su familia viven desde hace años en Florida.
Según informaciones del New York Times, el motivo del ingreso de Seles en la clínica es para ser tratada por el cirujano ortopédico Richard Steadman de la herida que sufrió en la espalda.
Gunther Parche, de 38 años, un hincha de la antigua Alemania Oriental, obsesionado con que Monica Seles dejara el número uno mundial a su ídolo, su compatriota Steffi Graf, fue el agresor. Durante uno de los descansos en el partido que jugaba Seles con la búlgara Magdalena Maleeva, la atacó con un cuchillo y le hizo una herida de 1,5 centímetros. Según la jugadora, tuvo mucha suerte, porque en el momento del impacto se había agachado a coger una servilleta de papel para secarse el sudor. Ello, siempre según ha declarado la jugadora en el periódico Bild, evitó que la herida fuese peor.
A raíz de esta agresión, distintos organizadores de torneos, como los de Wimbledon y Flushing Meadow han anunciado que tomarán medidas de seguridad. Al día siguiente de la agresión en Hamburgo, Steffi. Graf y Jana Novotna, que jugaron una de las semifinales del torneo, declararon que el tenis tenía que empezar a cuidarse de situaciones así porque cualquier día podría tocarle a ellas. Las primeras medidas de seguridad se han tomado en el torneo de Roma.
Todos los directivos del tenis han recordado que la violencia en el deporte, hasta ahora centrada en los deportes de equipo y, sobre todo, en el fútbol, han empezado a alcanzar al deporte individual.
