Un 'superjuez' con enemigos

Baltasar Garzón, titular del Juzgado de Instrucción número 5 de la Audiencia Nacional; el también magistrado Ventura Pérez Mariño, miembro destacado de la asociación Jueces para la Democracia, y Victòria Camps, catedrática de Ética y vicerrectora de la Universidad Autónomas de Barcelona, confirmaron ayer su inclusión como independientes ehn las candidaturas del partido socialista. Garzón ocupará el número 2 de la lista al Congreso de los Diputados por Madrid; Pérez Mariño orá de nùmero 1 en la candidatura de Lugo, también al Congreso, y Victoria Camps optará a un escaño en el Senado por la Circunscripción de Barcelona. Baltasar Garzón, a sus 37 años, es el juez más popular. Su paciente laboriosidad y cierta dosis de osadía explican que haya instruido los sumarios más calientes de la democracia. Se enfrentó a los aparatos más oscuros del Estado para desentrañar la trama de los GAL y llevó a prisión a los policías José Amedo y Michel Domínguez. La negativa del entonces ministro del Interior, José Barrionuevo, a explicar el destino de los fondos reservados impidió que el juez fuera más lejos. Paradojas de la política: le tendrá de compañero de candidatura.

Este jiennense, hijo de agricultores, que hubo de trabajar para costear su carrera de Derecho en Sevilla, tuvo destinos en Valverde del Camino (Huelva), Vitoria y Almería antes de ejercer como inspector del Consejo General del Poder Judicial en 1987. Entonces se ufanaba de no precisar escolta. Hoy, su currículo como titular del juzgado número 5 de la Audiencia Nacional ha disparado tanto la nómina de sus enemigos que ha tenido incluso que reforzarla.

Pero el enemigo tiene diferentes caras. Un sector de Interior nunca le perdonó el sumario de los GAL. La herida se reabrió con la detención de una docena de guardias civiles de la Unidad Central de Investigación Fiscal y Antidroga (UCIFA) cuyo comandante, José Ramón Pindado, provenía de la lucha antiterrorista.

También sentó en el banquillo al policía Ángel Duce y a Ricardo Sáenz de Ynestrillas por el asesinato del diputado de HB Josu Muguruza. La absolución del ultra en un sumario que él entendía perfectamente trabado resulta un duro golpe para el" juez. La decisión de la Sección Tercera de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional supuso la libertad para Ynestrillas. No era el primer regalo envenenado de dicha sección. Previamente le retiró la mayor parte de la investigación sobre el traficante sirio de armas Monzer al Kassar.

Esta misma sala debe abordar el sumario por la Operación Nécora, la primera gran redada contra narcos. Garzón teme que la historia se repita con este sumario.

Este magistrado también se enfrentó a la Mafia en la Operación Pitón, que ha supuesto un duro golpe al narcotráfico, con la detención de decenas de miembros de la familia calabresa.

La lista de sus enemigos le ha costado algunos disgustos, incluidas algunas campañas de descrédito. Desaparecieron documentos de su despacho; ha sido seguido para conocer su intimidad; ultraderechistas encapuchados han simulado disparar contra su domicilio... Pocos recordarán que es el juez que cuenta con más detenidos de ETA. Sólo le ven como combatiente contra los de un lado.

Todo ello ha influido probablemente en la decisión que acaba de tomar: meterse en el sistema para intentar cambiarlo.