Jardineros del Retiro critican su abandono

La petunia, flor de la protesta. Los jardineros del Retiro regalaron ayer ramilletes a los transeúntes para denunciar el abandono del parque, que languidece y se marchita a medida que se reduce la plantilla de sus cuidadores. Los jardineros se jubilan y nadie les sustituye, denuncian. Mientras, sigue sin divisarse el final del conflicto de la basura.

Los sindicatos calculan que el Retiro debería tener al menos 160 jardineros para conservarlo y repoblarlo con garantías. Su plantilla actual es de 107 trabajadores, que se reparten, en un solo turno, el mantenimiento de sus 115 hectáreas. En esta situación, "los setos se recortan a destiempo, las praderas se pierden, los árboles no se podan y las plantas no se cuidan", enumera Moisés García, de CC OO. Este colectivo expresó ayer sus denuncias con un día de trabajo voluntario que dedicaron a recuperar unos bancales de flores cubiertos por la maleza.

Además, según Miguel Ángel Morales, de UGT, "la organización del trabajo es mala porque se pretende que una plantilla cada vez más comprimida asuma las mismas tareas". Los jardineros se quejan de que tengan que dedicarse también a limpiar el parque, ya que sólo hay ocho basureros y únicamente trabajan los fines de semana.

También los guardias que vigilan el Retiro protestaban. Sólo hay tres vigilantes para custodiarlo. Uno de estos empleados asegura que en París existe un parque de las mismas dimensiones que está dotado con 50 guardias.

Conflicto de la basura

Mientras, barrenderos y empresarios volvieron ayer a estrellarse en sus planteamientos durante la corta reunión que mantuvieron para resolver el Conflicto de la limpieza viaria, que se inició hace 14 días y afecta a 14 distritos. La patronal acudió sin variar sus pretensiones de negociar una subida salarial del 3%. Para los trabajadores, el diálogo fue imposible, ya que pidieron un incremento mínimo del 8%.