Un campeón sin cancha
Godella, una pequeña población de 10.000 habitantes ubicada al norte de Valencia, todavía no tiene un pabellón en condiciones para que pueda jugar su equipo. El Dorna, por ello, disputó ayer la final de la Copa de Europa en Llíria, en el pabellón del equipo masculino de la División de Honor.Sólo poco antes de de comenzar la final de ayer se firmaba el protocolo por el que el Consejo Superior de Deportes, la Generalitat Valenciana, la diputación provincial y el propio ayuntamiento de la localidad invertirán 440 millones de pesetas para tal fin.
Rafael Cortés Elvira, director general del Consejo Superior Deportes, presente en el pabellón, pudo así aclamar a gusto las canastas que acabarían dando su segundo entorchado continental a las jugadoras españolas. A las españolas y a dos de las mejores extranjeras del mercado internacional, la rusa Natalia Zasulskaya y la norteamericana Katrin McClain. Zasulskaya, proclamada recientemente mejor jugadora de Europa.
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