Wall Street apuesta por la reactivación
La Bolsa norteamericana empieza a valorar positivamente la política económica del presidente Clinton, al menos en algunos de sus aspectos. Las intenciones de recortar aún más el déficit público han trasladado la atención de los mercados a la reserva federal, debido a que el carácter no inflacionista de los últimos planteamientos abre la puerta de par en par a la posibilidad de un recorte de los tipos de interés. Para apoyar esta hipótesis los analistas airean la pujanza del mercado secudario de bonos, cuyos precios han alcanzado máximos históricos y, consecuentemente, han situado la rentabilidad a niveles muy bajos. El Dow Jones abrió bajo la presión de los beneficios acumulados en los últimos días, lo que le obligó a mantener una evolución incierta durante la primera mitad de la sesión. Al final subió 2,70 puntos y cerró a 3.472,12 puntos.Tokio mantuvo la inercia y añadió otros 161 yenes a su escalada particular. Los analistas, en su búsqueda de justificaciones, aluden tanto al próximo fin del año fiscal como a posibles medidas de apoyo a la economía, aunque su estudio está en suspenso en estos momentos. El Nikkei se situaba al cierre en el 17.848.
En Europa hubo un poco de todo, con tomas de beneficios en Londres, tranquilidad en París y expectativas positivas en Francfort, lo que se tradujo para estos dos últimos mercados en la consolidación de niveles estratégicos. Londres optó por retirar algunos beneficios tras conseguir nuevos máximos históricos, lo que hizo que el FT 100 perdiera al cierre un 0,25%. París superó el nivel del 2.000 -cerró en 2.009- tras ganar un 0,27%, mientras que Francfort ve más cerca la baja de tipos y se anota una subida del 1,08%, lo que le hace elevarse por encima del 1.700.
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