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El dólar se sitúa en su cotización más baja al cambiarse a 116,85 yenes en el mercado de Tokio

Juan Jesús Aznárez

El dólar estadounidense registró ayer la cotización más baja de su historia contra la moneda japonesa al venderse a 116,85 yenes en el mercado de cambios de Tokio. Las constantes especulaciones sobre la existencia de un acuerdo internacional para reducir el monto. del superávit comercial nipón mediante una revaluación del yen determinaron esta fuerte apreciación.Las declaraciones del secretario norteamericano del Tesoro, Lloyd Bentsen, favorables a la apreciación, habían decidido el pasado viernes esa tendencia en el cambio. El Ministerio de Finanzas japonés duda sobre la conveniencia de una intervención del banco central para evitar una mayor caída del dólar, que el secretario del Gabinete, Yohel Kono, atribuyó en parte a las medidas económicas anunciadas en Estados Unidos. El sector exportador, al igual que en anteriores ocasiones, teme una disminución de los pedidos al encarecerse sus ventas, y algunas grandes empresas pueden decidirse por un aumento de los precios si disminuyen sus operaciones. Toyota, Nissan y Honda, en el sector automovilístico, lo hicieron el año pasado en Estados Unidos. Importantes corporaciones, que habían calculado un cambio de 125 yenes respecto al dólar en sus planes comerciales, admiten una paridad de 120 y anuncian graves pérdidas de estabilizarse un cambio más bajo.

Pese a que portavoces del Grupo de los Siete habían aconsejado un yen fuerte, el titular de la cartera de Finanzas, Yoshiro Hayashi, desmintió acuerdos en ese sentido. La precisión vino recogida en una declaración difundida a media mañana, cuando la orientación del mercado era irreversible.

Los operadores, que ignoraron los llamamientos a la calma efectuados por las autoridades japonesas tras la preocupante depreciación del dólar, sospechan que los siete países más ricos han celebrado encuentros previos a la reunión ministerial del próximo sábado en Londres para coordinar una paridad monetaria adecuada a la crisis y favorecer la gradual apreciación del yen. El volumen de negociación totalizó los 11.548 millones de dólares.

Caída en picado

Yasushi Mieno, gobernador del Banco de Japón, negó que el Grupo de los Siete vaya a promover esa política, pero reconoció que el desplome de la moneda estadounidense puede influir negativamente en los esfuerzos del Gobierno nipón por crecer 3,3 puntos y acortar el superávit comercial a través de la estimulación de la demanda interna y el incremento de las importaciones procedentes de las naciones afectadas por el déficit.Con posterioridad a la firma del Acuerdo Plaza de 1985, suscrito por el entonces Grupo de los Cinco para depreciar el dólar, la moneda norteamericana se situó a la baja: de 240 yenes pasó a 120 en enero de 1988. Dos años después subió hasta los 160 para caer de nuevo. En menos de dos semanas ha caído en picado desde los 124 yenes. Este sábado se colocó en 119 yenes, muy cerca del récord de 118,60 de septiembre. Anticipándose, numerosas empresas niponas exportadoras acumularon yenes para sus operaciones en el exterior.

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