Wall Street, a la espera del programa económico
Los inversores norteamericanos han optado en esta última sesión por generar liquidez en sus carteras de valores. Esta presión vendedora se saldó con una pérdida de 30,26 puntos hasta situarse en los 3.392,43. El dinero salta de un sector a otro provocando descalabros y ascensiones. Esta vez le tocó el turno a biotecnología y asistencia sanitaria, dos grupos cuyos componentes habían ganado altura con facilidad en las sesiones anteriores.El excelente resultado de la subasta de bonos a 30 años del día anterior, en la que la rentabilidad fue del 7,22%, no logró evitar que el índice de los principales valores industriales descendiara por debajo del soporte de los 3.400. Las pérdidas históricamente altas del fabricante de automóviles General Motors contribuyeron a extender el pesimismo en el mercado.
Los analistas centran todas las expectativas de la Bolsa norteamericana en el discurso que el próximo día 17 pronunciará el presidente Clinton, pues en él deberá exponer su programa económico en detalle, algo que hasta ahora ha evitado.
Tokio perdió el nivel del 17.000 debido a las ventas provocadas por la variación al alza de la cotización del yen respecto del dólar. Los operadores aludían exclusivamente la este motivo, sin hacer mención alguna de la situación de la economía japonesa tras el recorte de los tipos de interés. El Nikkei cedió 238 yenes y se sitúa en el 16.851.
Los mercados europeos sestearon ante la ausencia de problemas puntuales, sobre todo en los mercados de divisas. Londres ganaba un 0,29% a pesar de que el ministro de economía descartó una reducción de los tipos de interés. En París el avance fue del 0,34% y Francfort subió un 0,63%.
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