Juan Pablo II

ha demostrado encontrarse en buena forma física, tras el bache sufrido el pasado julio con la intervención quirúrgica del colon, y ha esquiado en las pistas de Campo Felice, en la región central de Los Abruzzos. El papa Wojtyla, que el pasado mayo cumplió 72 años, se desplazó, el martes por la mañana, a las pistas de Campo Felice, a un centenar de kilómetros de Roma, donde el termómetro marcaba los 12º centígrados bajo cero. Acompañado de un séquito de seis personas, el pontífice realizen un paseo a pie, sobre el mismo lugar que visitó hace dos años, el 28 de diciembre de 1990, y llegó hasta la base de la pista Della volpe (Del zorro), desde donde se dirigió a la cima, en un vehículo todoterreno especial para nieve. Seguidamente, el Papa esquió varias veces sobre un recorrido rojo (de dificultad media), de unos 500 metros, interrumpiendo su ejercicio para almorzar un bocadillo de jamón y zumo de frutas, reanundándolo después, esta vez confundido entre otros esquiadores, que no lo recocieron.-