El BBV y los Olazábal se acusan mutuamente de planear dividir El Encinar

La pugna entre el BBV-Metrovacesa y la familia Olazábal por el control de la sociedad El Encinar de los Reyes, SA, y de su principal activo -una finca de 1,3 millones de metros cuadrados al norte de Madrid- se ha recrudecido. Las dos partes acusan al contrario de haber propuesto la escisión, en dos, de la finca El Encinar como el único medio para alcanzar un acuerdo.Según la versión del BBV, los Olazábal habrían ofrecido "partir" El Encinar en una carta remitida al vicepresidente del BBV, Javier Gúrpide, "tras el diálogo abierto a petición del Banco Central Hispanoamericano -asesor y avalista de los Olazábal en su OPA sobre la sociedad-". Por supuesto, la versión de los Olazábal es radicalmente distinta. Según el portavoz de Gevisa -sociedad instrumental de la familia- "los Olazábal no desean la escisión de El Encinar. Esa idea la maneja desde el mes de julio el BBV-Metrovacesa". Fuentes del departamento de asesoría de empresas del BCH añaden que "la fórmula de la escisión fue propuesta a los Olazábal por Mario Fernández [abogado del BBVI a Jaime Zurita [abogado de los Olazábal] a raíz de la OPA de octubre y fue rechazada".

Al margen de versiones encontradas, la salomónica historia recuerda a los varios miles de accionistas de la sociedad, que asisten entre regocijados y confusos a la pelea empresarial, que El Encinar de los Reyes es un diamante en bruto. En la parte de la urbanización dependiente del ayuntamiento de Alcobendas, según fuentes de la sociedad, no se puede construir. Por el contrario, la parte perteneciente al municipio de Madrid podría ser edificada.

Las acusaciones ponen fin al menos temporalmente, a los tímidos contactos iniciados esta, semana entre el BBV y los Olazábal para tratar de alcanzar un acuerdo y evitar un enfrentamiento que se ha trasladado a los tribunales [los Olazábal han denunciado al BBV por anunciar que lanzará una OPA mejor que, la lanzada por la familia en octubre sobre El Encinar].