Las herencias de Guillermo, Enrique y Paquirrín

Los príncipes Guillermo y Enrique, hijos de Carlos de Inglaterra y de la princesa Diana, recibirán cada uno 1.000 libras esterlinas (unas 175.000 pesetas) de la herencia de su abuelo materno, el conde Spencer, valorada en más de 88 millones de libras esterlinas (unos 15.000 millones de pesetas), según el testamento de éste, dado a conocer anteanoche. La princesa Diana y sus dos hermanas recibirán objetos de recuerdo que establecerán los albaceas.Gran parte de la herencia está constituida por los bienes y objetos de valor que se encuentran en Althorp, la mansión familiar ubicada en el condado de Northampton, al norte de la capital británica. La casa y el parque que la rodea no fueron propiedad personal de lord Spencer, sino de un grupo de familiares. Lord Spencer, fallecido el pasado 29 de marzo, legó a su segunda esposa, Raine, una pensión vitalicia de 10.000 libras esterlinas (1.750.000 pesetas), los bienes de dos casas en Borghnor Regis y una tercera en Mayfair, un automóvil y el dinero en inversiones existentes en la Global Asset Management.

El resto de la herencia, aún sin determinar, se dividirá en distintas partidas a beneficio de sus hijos y sus nietos. Por su parte, los abogados encargados del tema han señalado que queda aún por precisar una parte importante que habrá que dedicar al pago de los derechos sucesorios.