Dantesca colisión en aguas indonesias

Las peligrosas aguas del estrecho de Malaca, que separan la península de Malaisia de la isla indonesia de Sumatra y son surcadas a diario por cientos de naves, fueron escenario poco después de la medianoche del sábado -las 17.30, hora peninsular- de un dantesco choque entre un petrolero japonés con bandera de Liberia y un carguero de Hong Kong registrado en Panamá, que ardió por completo.Por el momento han sido rescatados con vida 13 de los 25 tripulantes del petrolero de 96 toneladas Nagasaky Spirit y 2 marineros del barco panameño, además del cuerpo sin vida de otro de sus compañeros, según informó un portavoz de la Embajada norteamericana en Kuala Lumpur. Sin embargo, son por el momento los únicos supervivientes de las 21 personas que, según la compañía de seguros Lloyd's, navegaban en el carguero de 27 toneladas Ocean Blessing, después de que su barco se viera envuelto en las llamas que brotaban de la mancha de aceite derramada por el petrolero.

"El carguero estaba prácticamente destruido, según palabras de algunos testigos del accidente", explicó un portavoz de la Embajada de Estados Unidos en Singapur, quien informó también que, a pesar de su penoso estado, la nave no había naufragado aún.

En un primer momento, la tensión entre los barcos que acudieron a la llamada de rescate se agudizó porque el capitán del Nagasaky Spirit había denunciado en su primera petición de socorro, escuchada en Sidney (Australia), que su nave había sido tiroteada y dos de los tanques alcanzados por esas balas, por lo que toda la tripulación abandonaba el barco hacia las lanchas salvavidas. Posteriormente no volvió a insistir en este dato, por lo que se mantiene la tesis de la colisión fortuita. Un portavoz del Ejército indonesio en Yakarta ha replicado que es poco probable que la colisión tuviera su origen en un ataque de los piratas que infestan estos mares. "No suelen utilizar casi nunca armas de fuego y abordan pequeños navíos de pesca armados de sables y navajas, especialmente en el canal Phillips, frente a Singapur", explicó este portavoz.

Las autoridades indonesias, que se encargarán de la investigación de las causas del siniestro al haberse producido el choque en sus aguas jurisdiccionales, han hecho un llamamiento a los barcos que naveguen por la zona para que colaboren en la búsqueda de supervivientes.

Ésta es la cuarta colisión importante en el estrecho de Malaca, un paso vital para los barcos de la zona. En agosto, tres personas fueron asesinadas y otra desapareció después de que un crucero de lujo registrado en Bahamas chocase con un pesquero de Taiwan. En julio, un destructor de EE UU colisionó con un mercante de Singapur y, en junio, una persona murió en el accidente de dos superpetroleros que no perdieron crudo.

Los tripulantes de dos helicópteros del navío norteamericano Niagara Falls, que viajaba con provisiones para la VIIFlota y participa también en las tareas de rescate, han asegurado que la colisión no ha producido una marea negra.