Las diferencias entre las religiones

Hace pocos días tuvo lugar una reunión o convención, no recuerdo exactamente el nombre con que fue calificada, de seguidores de determinada religión cristiana, creo que evangelista. Es lo de menos, pues todos los seguidores de cualquier fe deben tener derecho a hacerlo, públicamente o en privado.Sin embargo, viéndolos, como me ocurre con los fieles de otras religiones, no puedo evitar reflexionar acerca de las grandes convulsiones que en la humanidad ha producido el reincidir en el hecho diferencial de las diversas religiones, que casi siempre ha conducido a grandes desgracias, como guerras, etcétera. Últimamente lo podemos ver en la guerra de Yugoslavia, en la cual parece que uno de los motivos es el enfrentamiento entre musulmanes, católicos y cristianos ortodoxos.

De tal forma, resulta que siendo Jesucristo el principal profeta -para los musulmanes hasta la llegada de Mahoma Jesús fue el más importante, de los profetas-, a lo largo de la historia sólo se ha incidido en el hecho diferencial; cuando las religiones mencionadas, así como la judía, beben de las mismas fuentes.

Así, Abraham fue su primer profeta, Jesús el más importante, y tanto la Biblia católica, como la Torah o el Corán musulmán se alimentan de aquella ley primordial que inspiraba Moisés, Íambién antiguo profeta para las tres religiones principales que ha tenido la humanidad, si excluimos los budistas, hindúes o sintoístas, que para los occidentales caen más en el campo de lo filosófico.

No creo que los místicos, los sufies o los rabinos busquen otra cosa que la trascendencia aunque crean que lo hacen de diferente forma. En resumen, no tiene sentido para los que nos interesa el hecho religioso incidir en siempre peligrosas diferenciaciones que sólo pueden conducir a enfrentamientos y guerras. Malraux dijo que el siglo XXI será religioso o no será. Muy bien, pero que el dilema no sea elegir entre una religión o muerte por diferencias ideológicas.-