Los marineros de la fragata 'Extremadura' se enteraron por televisión de su marcha

Los 240 tripulantes de la fragata Extremadura, atracada en el arsenal militar de Ferrol, aguardaban ayer con aparente tranquilidad su salida hacia el Adriático, prevista para las 10 de la mañana de hoy. Sólo algunos familiares de los marineros acudieron a primera hora al muelle de la base naval para pasar con ellos las últimas horas en tierra. Muchos mozos de reemplazo se enteraron de su marcha por televisión.

Los marineros españoles que supervisarán el embargo a Serbia y Montenegro creen que su misión. será fácil, "Por lo menos bastante más fácil que para los que fueron al golfo Pérsico", comentaban tripulantes de la fragata.La guerra en la antigua Yugoslavia ha trasladado a todo el mundo imágenes terribles, pero aún así no parece que entre los marineros de la Extremadura despierte los mismos temores que hace dos años suscitaba la participación en el bloqueo a Irak. Aquí nadie ha visto máscaras antigás ni ha oído apocalípticas amenazas de destrucción y eso se nota en el ánimo con que los mozos afrontan su misión.

Algunos marineros hasta se toman con humor su viaje. "Haremos un poco el gilipollas", comentaban ayer entre risas un grupo de tripulantes de la Extremadura que abandonaban el barco para dar su último paseo. En la fragata, que entró en servicio en 1976, viajan 240 marineros, de los que casi un centenar están cumpliendo la mili.

A primera hora de la tarde de ayer aseguraban no haber recibido comunicación oficial de que su barco formará parte de la expedición de la Unión Europea Occidental (UEO) que controlará los accesos al Adriático en el estrecho de Otranto. "Sabemos que tenemos que ir porque lo hemos visto en la televisión y porque hemos estado preparando el barco y cargándolo de víveres. Pero oficialmente no nos han dicho nada. Suponemos que saldremos mañana [por hoy] pero tampoco sabemos a qué hora", se quejaban algunos marineros.

A los que estaban de permiso les llamaron el lunes para que regresaran urgentemente a Ferrol. Es el caso de un joven vizcaíno que comentaba con ironía: "No me dijeron para qué era. Sólo me explicaron que estaban haciendo lo mismo con los tripulantes de todas las fragatas. ¡Que me lo iba a creer! Ya me imaginé que era para ir a Yugoslavia".

Los marineros de la Extremadura han pasado las últimas semanas de maniobras en Estados Unidos y Holanda. La mayoría no tiene muy claro qué es lo que está pasando en Yugoslavia. "En el mar no escuchamos las noticias y no nos enteramos de nada", se justifican.

Los que están cumpliendo la mili consideran injusto que se les envíe a este tipo de misiones, pero han aceptado las órdenes con resignación. "Nos han fastidado el verano. Y lo peor es que desde febrero no hemos podido ir a casa", se lamentaban unos jóvenes andaluces que se licenciarán en noviembre. "Ni siquiera nos van a pagar un duro", apostillaba otro.

Muchos se quejaban también de que en los últimos días no han parado de trabajar en los preparativos de la misión. Desde el lunes, sólo han podido salir a la calle tres horas al día.

La Extremadura, como el resto de los barcos atracados en Ferrol, estaba ayer engalanada por la festividad de la Virgen del Carmen, patrona de la Armada. En el arsenal hubo jornada de puertas abiertas para todos, menos para los periodistas.

Sin embargo, pocos marineros de la fragata recibieron la visita de sus familiares, que apenas han tenido tiempo de trasladarse a Ferrol. Una mujer de Almería, que acababa de ver a su hijo, no pudo reprimir el nerviosismo. "Estoy muy asustada, pero lo único que quiero es que me lo traten bien", señaló.

Por otra parte, un avión de transporte Hércules del Ejército del Aire español viajará el lunes a Zagreb con 100 toneladas de alimentos. Desde la capital croata, realizará dos vuelos diarios a Sarajevo entre el martes y el jueves, informa Europa Press.