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Las entrañas de la ciudad

Las obras del Metro en 1925 descubrieron las ruinas del alcázar bajo la plaza de Oriente

Juan Carlos Sanz

La construcción en 1925 del ramal de Metro que enlaza las estaciones de ópera y Norte (Príncipe Pío) reveló que el subsuelo de la plaza de Oriente -atravesada de parte a parte por el túnel- se encuentran los restos del antiguo alcázar de Madrid y de varias edificaciones anexas. En un estudio publicado en 1969 se reconoce que fue necesario recurrir a la dinamita para abrir paso al metro entre los cimientos de unas caballerizas. Un equipo de arqueólogos trabaja ahora para el Ayuntamiento en las entrañas de la plaza, con el fin de investigar si es viable o no construir en ella un paso subterráneo y tres plantas de aparcamientos sin destruir el pasado de la ciudad.

Parece que la familia real estaba muy interesada por conocer la causa de las detonaciones que alteraban su descanso. Cuentan las crónicas que el Príncipe de Asturias visitó las obras del ramal Norte después de una convalecencia en el palacio de Oriente. En la obra El Metro de Madrid, medio siglo al servicio de la ciudad (1919-1969), de Marino Gómez-Santos, se precisa que los 1.129 metros del ramal Ópera-Norte quedaron abiertos al público el 26 de diciembre de 1925.José María Aguirre, el ingeniero que dirigió las obras del ramal, "recuerda las dificultades que surgieron para el paso por debajo de la plaza de Oriente", "cómo aparecieron las ruinas del antiguo alcázar" y "las grandes cantidades de dinamita que fueron necesarias para abrir el túnel".

El túnel del ramal norte atraviesa la plaza de Oriente a una cota que oscila entre los 16 y los 24 metros bajo la base de la estatua de Felipe IV. El proyecto de aparcamiento subterráneo impulsado por el Ayuntamiento obligará a excavar a más de 12 metros de profundidad.

Por el momento, la dirección de Patrimonio Cultural de la Comunidad de Madrid supervisa "de cerca" las excavaciones arqueológicas. Ya se han localizado, a 50 centímetros de la superficie, los primeros restos históricos.

Jardín histórico

Miguel Ángel Castillo, responsable de este departamento, asegura que la plaza de Oriente posee la calificación urbanística de jardín histórico, que garantiza su protección frente a cualquier reforma. Mientras tanto, Patrimonio Nacional, como administrador del palacio Real, aún no ha expresado su opinión sobre el proyecto del arquitecto Miguel de Oriol, que propone la construcción de un paso subterráneo bajo la calle de Bailén y tres plantas de aparcamientos, con 60 plazas para autocares y otras 1.000 para turismos. Y además, 13.000 metros cuadrados de "centro coniercia1% según la Comunidad, o 10.000 metros cuadrados de "servicios culturales", según el Ayuntamiento.Entre tanto, hasta los responsables del Ayuntamiento de Madrid y de la Consejería de Transportes ha llegado una propuesta del Ministerio de Cultura, responsable de la rehabilitación del Teatro Real, para suprimir el ramal norte -el paso de los trenes produce vibraciones que afectan a la calidad de las representaciones musicales- y ceder el túnel como posible almacén del teatro de la ópera.

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La Comunidad de Madrid ha trazado hasta el momento la carta arqueológica en 79 municipios y espera completarla en otros 28, para contar con datos sobre el subsuelo en un 70% del territorio regional. En la comarcas de Alcalá de Henares -el entorno de la antigua Complutum-, la vega del Tajuña y las áreas de Titulcia y Arganda del Rey se encuentran los yacimientos arqueológicos más valiosos de la Comunidad madrileña.

"Lamentablemente, en muchas ocasiones no podemos dar publicidad a nuestros hallazgos para impedir la acción de los furtivos que destruyen los yacimientos utilizando detectores de me tales, en busca de supuestos tesoros", confiesa Castillo. Hasta ahora se han desarrollado 300 excavaciones en las zonas de pro tección arqueológica de Madrid: el centro histórico de la capital y las terrazas del río Manzanares.

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Sobre la firma

Juan Carlos Sanz
Es el corresponsal para el Magreb. Antes lo fue en Jerusalén durante siete años y, previamente, ejerció como jefe de Internacional. En 20 años como enviado de EL PAÍS ha cubierto conflictos en los Balcanes, Irak y Turquía, entre otros destinos. Es licenciado en Derecho por la Universidad de Zaragoza y máster en Periodismo por la Autónoma de Madrid.

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