El Ayuntamiento pretende que el Estado pague los 4.000 millones de la reforma del puente de Ventas

La reforma del puente de Ventas pasará a la historia por ser la última obra en ejecutar del plan de accesos que acometen el Ministerio de Obras Públicas, la Comunidad y el Ayuntamiento. La intención municipal es convocar un concurso en octubre para redactar un proyecto más ambicioso y 2.500 millones de pesetas más caro que el previsto. Pero el Ayuntamiento quiere que el sobrecoste también lo asuma el Estado.

El alcalde de Madrid, José María Álvarez del Manzano, realizó ayer una visita más a las obras de la operación de reordenación de Ventas, en esta ocasión para inaugurar la pavimentación de las calles que delimitarán los edificios de oficinas, comercio y viviendas que se levantarán en la zona. Sin embargo, a esta operación aún le falta uno de sus pilares: la reforma del puente de Ventas sobre la M-30.El Ayuntamiento pretende realizar una reforma más importante que la prevista inicialmente para dar continuidad a los laterales de la M-30, que ahora se interrumpen al llegar a la zona. Su idea, que implica también la ampliación del puente sobre la autovía, eleva la factura de la obra de los 1.500 millones de pesetas iniciales a los 4.000.

El concejal de Urbanismo, José Ignacio Echeverría, declaró ayer su intención de convocar en octubre un concurso de proyecto y obra para que las obras pudieran comenzar el próximo año. Mientras, el municipio intentará llegar a un acuerdo con el Estado para que éste asuma todo el coste económico de la obra. Sólo en última instancia, afirmó Echeverría, el Ayuntamiento podría aportar a la obra parte de los beneficios obtenidos con la venta de parcelas en la zona.