El presidente balear declara ante el juez por el intento de soborno de Calvià

El presidente del Gobierno balear, Gabriel Cañellas, del Partido Popular (PP), declaró ayer en su despacho oficial durante casi una hora ante el magistrado del Tribunal Superior de Justicia de Baleares José Zaforteza, que instruye las diligencias sobre el intento de soborno de un concejal socialista del Ayuntamiento de Calvià (Mallorca) por parte de un militante del PP y un empresario. Gabriel Cañellas compareció como imputado en el caso a instancias de la parte acusadora, el PSOE y el concejal de este partido objeto del soborno, José Miguel Campos.

"Sería inoportuno y extemporáneo que hablase sobre la declaración" se limitó a manifestar Cañellas tras prestar declaración.

Los abogados del Ayuntamiento del Calviá, del concejal Campos y del PSOE realizaron una serie de preguntas en las que pretendieron vincular al presidente balear y máximo dirigente del PP en la trama del presunto intento de soborno. Tras la comparecencia de Cañellas, los letrados de la parte acusadora señalaron que nada había cambiado en el caso.

El PSOE denunció en febrero que dos personas vinculadas al PP ofrecieron 100 millones de pesetas al concejal Campos para que se pasara al Grupo Mixto, apoyara una moción de censura contra la alcaldesa, Margarita Nájera, también del PSOE, y votara la elección del candidato del PP. La denuncia fue acompañada por las grabaciones magnetofónicas de tres conversaciones mantenidas por Campos con los interlocutores. A resultas de las investigaciones, el juez decretó la prisión para el militante del PP Miguel Deyà y para el empresario inmobiliario Guillermo Ginard.