Recargo municipal de hasta 700.000 pesetas por cada plaza de aparcamiento para residentes

El Gobierno municipal del Partido Popular ha descubierto una mina de oro en el subsuelo de la ciudad: el impuesto sobre los aparcamientos para residentes (PAR). Los compradores de las plazas nuevas tendrán que pagar desde ahora un recargo que podrá llegar a las 700.000 pesetas, al margen del coste de la construcción. El PSOE calcula que el Ayuntamiento ingresará 2.500 millones de pesetas, sólo del próximo concurso, que incluye 13 aparcamientos. "Todo un negocio a costa de duplicar el precio de los aparcamientos", considera IU.

En estos momentos se están construyendo en Madrid 20.000 plazas de aparcamiento para residentes. Si a cada una de ellas se le exigiera un impuesto medio de 300.000 pesetas, el Ayuntamiento habrá obtenido 6.000 millones de pesetas. Los responsables de la Hacienda municipal han descubierto esta fuente extra de ingresos y están dispuestos a explotarla, aunque sin carácter retroactivo.El alcalde, José María Álvarez del Manzano, lo avisó en el pleno de abril: "Los próximos pliegos de los PAR serán más complicados económicamente". En aquella sesión, el PSOE consiguió que se aplazara la aprobación de los concursos para construir 13 aparcamientos hasta que estuvieran confeccionadas las nuevas condiciones.

El grupo socialista pensaba que, tal y como habían propuesto, los nuevos pliegos iban a ser más exigentes con la seguridad y los plazos de construcción de los aparcamientos, ya que se han producido hundimientos en unos y retrasos en otros.

Indirectamente, el PSOE hizo un favor al Gobierno municipal pidiendo que se aplazara el concurso de aquellos 13 estacionamientos. El PP empezará a aplicar en ellos su nuevo impuesto. En total, se verán afectadas un máximo de 7.700 plazas, de las que el Ayuntamiento podrá obtener 2.500 millones de pesetas.

El impuesto que ha inventado el Ayuntamiento variará según la categoría fiscal de la calle en que se ubique el estacionamiento. El canon mínimo será de alrededor de 150.000 pesetas -incluso se podría suprimir en algunos casos-, y el máximo podrá llegar a las 700.000 pesetas.

Precios

Por ejemplo, cada plaza del nuevo aparcamiento de Rosales, que se perforará frente al templo de Debot, será recargada con 650.000 pesetas. Las del estacionamiento previsto en Francos Rodríguez, con 550.000 pesetas cada una; con 350.000 pesetas las plazas del de Vía Carpetana, Lezama o San Romualdo, y con 250.000 las de la calle de los Olmos.Los compradores de estas plazas tendrán además que pagar el impuesto anual de 3.500 pesetas que ya existía.

El Gobierno municipal del PP advirtió en varios plenos que las plazas de los PAR en Madrid eran muy baratas en comparación con otras ciudades y con los precios del mercado. "En Barcelona, las plazas para residentes se venden a cuatro millones de pesetas", ha repetido en las sesiones el c9ncejal de circulación, José Antonio García Alarilla. En Madrid rondan el millón de pesetas.

Eugenio Morales, concejal del PSOE, lamenta que "los PAR, que nacieron como una de las soluciones al problema del tráfico, se hayan transformado en un negocio".

"El Partido Popular no proyecta aparcamientos o pasos subterráneos pensando en la movilidad de los madrileños. Sólo le mueve un afán lucrativo", comentó ayer. "A partir de ahora, el PP pondrá los estacionamientos donde produzcan más dinero, no donde se necesiten".

José Luis Pestaña, concejal de IU, comentó: "Si los pasos subterráneos los hacen los privados, y ahora los residentes que adquieren una plaza de aparcamiento tienen que pagar un canon, ¿qué hace el PP con el dinero que recauda de los impuestos?".

Los nuevos pliegos incluyen, también como novedad, la condición de que se reserve el 8% de las plazas a los comerciantes de la zona. "Hasta ahora tenían prioridad los vecinos, y sólo si sobraban plazas, éstas podían ser adquiridas por los comercios cercanos", explica Morales.

El concejal de IU critica que se haya desvirtuado el concepto de PAR. "Además, el dinero que se obtenga con este nuevo canon va a ir directamente a Hacienda y no se invertirá en la mejora del transporte público ni en hacer la ciudad más transitable para los peatones".

Con la nueva medida tributaria, las plazas de estacionamiento para residentes se encarecerán entre un 30% y un 100%, según la categoría de la calles, calcula José Luis Pestaña. "El caso es que no han recogido en los pliegos ni una sóla propuesta de la oposición", explicó. "Sigue sin garantizarse el cumplimiento de los plazos de construcción".

El nuevo pliego de condiciones obliga a abonar el 50% del impuesto a los nueve meses de la adjudicación, "lo que no implica que haya empezado la obra", matiza Morales. "El PSOE propuso que los plazos empezaran a contar desde que se adjudica el estacionamiento, pero lo han fijado en el inicio'de la construcción. En ese intervalo pueden pasar meses, en los que el vecino paga y la obra no comienza".