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Cuando la tierra tiembla en Maastricht

El peor terremoto de los dos últimos siglos sacude Europa occidental

Isabel Ferrer

"La casa se mueve. Hay un terremoto", dijo a su marido, asustada y medio dormida al principio de la madrugada, una joven holandesa de Roermond, localidad al sureste del país, a unos 40 kilómetros de la famosa Maastricht. "¿Aquí? No puede ser", contestó él. "Sigue durmiendo, querida. Tienes una pesadilla". Pero no lo era. A las 3.22, en sólo 10 segundos, el peor seísmo de los últimos 200 años recorrió parte de Europa occidental. Sumó 5,5 grados de magnitud en la escala de Richter (con un máximo de 9) y su epicentro fue localizado a 10 kilómetros al sur de Roermond (Limburgo). Los sismógrafos del Instituto Nacional de Meteorología holandés no estaban preparados para una sacudida tan violenta, y la cifra debió ser cotejada con los de sus colegas alemanes.En el valle germano del Rin, Bélgica y norte de Francia, la tierra también tembló. En Bonn, una anciana de 79 años falleció víctima de un ataque al corazón provocado por el miedo. Y en Heinsberg, próxima a Aquisgrán (Alemania), resultaron heridas 25 personas, cuatro de ellas de gravedad. Todas habían abandonado asustadas sus domicilios y fueron alcanzadas por tejas y piedras que se desprendieron y actuaron como proyectiles.

Todavía perplejo, el matrimonio holandés permitió que la televisión filmara los muros resquebrajados de su casa y el papel rasgado y sucio de la pared. En plena oscuridad, 15 de sus vecinos tuvieron que ser atendidos de amagos de infarto. Poco después del terremoto, Roermond parecía tomada por buena parte de sus 39.000 habitantes, en, pijama, asustados y confusos.

Con las primeras luces del lunes, los meteorólogos despejaron todas las dudas. Un movimiento registrado en la denominada falla de PeeIrand era la causante del terremoto. Esta quiebra del terreno pasa por Roermond y alcanza la provincia de Brabante, sobre la villa belga de Amberes. En 1932 provocó otro terremoto que alcanzó 5 grados en la escala de Richter.

En Alemania, el Ministerio del Medio Ambiente ha asegurado que las centrales nucleares de Mülheim-Kärlich y Biblis no sufrieron los efectos del terremoto. Ambas han sido paradas por motivos de seguridad, aunque en esta última uno de los reactores se detuvo automáticamente. En Colonia y Bonn, varios testigos vieron tambalearse los edificios más altos.

Cuando el susto casi había pasado, una misma pregunta recorrió veloz el sureste de Holanda. ¿Quién pagará las pérdidas ocasionadas por el terremoto? Las firmas aseguradoras han dejado claro que ellas no abonan los destrozos de un desastre natural. En Roermond, el Ayuntamiento está pensando en crear un fondo para compensar a los vecinos.

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