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La dirección del Metro no aprecia aún suciedad como para cerrar estaciones

La dirección del Metro no ve todavía "condiciones objetivas que justifiquen el cierre en ningún vestíbulo" como consecuencia de la suciedad acumulada tras 20 días de duración de la huelga del sector de la limpieza en numerosos edificios públicos. Portavoces del comité de empresa, sin embargo, calificaron la situación de "insoportable" y "lamentable". Un dirigente sindical fue explícito: "El polvo en suspensión ha convertido el Metro en el desierto cuando se levanta una calima".

Los responsables del servicio médico y de la comisión de seguridad e higiene de esta compañía ferroviaria, compuesta por directivos y trabajadores, recorrieron en la tarde de ayer varias estaciones para emitir un informe verbal sobre el que se basó la decisión de la dirección de la empresa.Los comisionados estuvieron en las estaciones de la Puerta del Sol, Callao, Gran Vía, Tirso de Molina, Chueca y Atocha. En Sol, donde confluyen tres líneas y por donde se mueven a diario cerca de 700.000 personas, todos los implicados reconocen que la basura acumulada ha llegado ya a un grado preocupante.

La dirección quiere apurar al máximo el momento de cerrar vestíbulos y actuar de esta manera -si hace falta y el conflicto no se ha resuelto- durante la Semana Santa, cuando en Madrid haya menos personas y menos usuarios en el Metro. El comité ve detrás de esta postura una "actitud de pasividad y complicidad con la patronal de la limpieza".

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