Ley, orden y alianzas con la izquierda
"Nuestro elector es amante de la ley y el orden, pero, según ese criterio, toda Europa sería fascista. Si podemos hacer alianzas poselectorales, las haremos con la izquierda", dice desde su magnífica villa de Como el profesor Gianfranco Miglio, el teórico de la Liga, que le hace así eco a su líder, Umberto Bossi. Miglio acaricia la idea de una nueva mayoría de liguistas, socialistas, ex comunistas y republicanos, para dejar en la oposición a la Democracia Cristiana.Extraña pareja la que forman este notable catedrático de Ciencias Políticas de la Universidad Católica de Milán, de más de 70 años, encuadrado hasta 1959 en la derecha democristiana, y el hombre de 50 años, hijo de campesinos, ex estudiante frustrado de Medicina, que personaliza la Liga. Se conocieron en 1988, un año después de que Bossi llegara al Senado, porque "amigos comunes" les presentaron convencidos de que se entenderían. Ahora, cyando la Liga se está transformándo en un verdadero partido político y Miglio, independiente en las listas de la Liga, despacha regularmente con Cossiga y Andreotti mientras su líder patea las plazas, sus opiniones no son idénticas.
Umberto Bossi rehúye comprometerse en alianzas poselectorales y se revuelve cuando se le mencionan los contactos de Miglio con el presidente del Gobierno: "Andreotti lo hace para humillar a la Liga, pero Miglio no le escucha y, si le escuchara, perderíamos un independiente", afirma.
Les sigue uniendo el federalismo. Para Bossi, esa reestructuración "inevitable será la liberación del norte, el centro y el sur". Para Miglio, "España ha dado un gran ejemplo con el estatuto de autonomía de Cataluña".
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