Jordi Pujol amplía su mayoria absoluta y los socialistas sufren un serio retroceso

Jordi Pujo revalidó ayer por cuarta vez su mayoría parlamentaria en Cataluña, obteniendo 71 escaños sobre un total de 135, lo que significa ampliar la mayoría absoluta de la que ya disfrutaba Convergéncia i Unió (CiU). Estos datos corresponden al 93,2% de los votos escrutados, poco después de la una de la madrugada. Pujol podrá formar de nuevo Gobierno en solitario y seguir cuatro años más como presidente de la Generalitat, institución que encabeza desde 1980.

El retroceso de los socialistas, que pierden tres escaños, y se sitúan en 39, y la subida de Esquerra Republicana de Catalunya, que se coloca como tercera fuerza parlamentaria con 11 diputados, son los datos más relevantes de estos comicios. El PP aumenta un escaño respecto a los seis que tenía, un correcto resultado para su nuevo candidato, Aleix Vidal-Quadras, pero un alza leve al fin y al cabo.En el cómputo global de resultados se percibe una tendencia conservadora y nacionalista en las preferencias del electorado. CiU obtiene un resultado que la consolida como fuerza perfectamente asentada en el centro del panorama político catalán, y su líder, Jordi Pujol, se sitúa en el horizonte de permanecer 16 años en el poder, desde que en 1980 venciera por primera vez en unas elecciones catalanas.

Los resultados de Esquerra Republicana, que había introducido por primera vez en la historia reciente un programa explícito para la obtención de la independencia de Cataluña, constituyen una de las sorpresas de la jornada y proporcionan al partido que dirige Angel Colom serias posibilidades de influir en la vida parlamentaria. El Centro Democrático y Social desaparece del Parlament.

Los deficientes resultados obtenidos por los socialistas constituyen un voto de castigo para el Gobierno central y replantean el liderazgo del PSC, protagonizado en las tres últimas elecciones autonómicas por Raimon Obiols, con resultados siempre decrecientes.

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