_
_
_
_
_

Las 12 repúblicas de la CEI competirán juntas por última vez en los Juegos Olimpicos de Barcelona

La Comunidad de Estados Independientes (CEI) participará por última vez como un equipo en los Juegos de Barcelona, según se confirmó ayer tras la reunión de los representantes de las 12 repúblicas ex soviéticas con el Comité Olímpico Internacional (COI) en Lausana. A cambio, el COI reconocerá de forma provisional a sus comités respectivos, que sólo serán miembros ofíciales desde 1993. La CEI, llamada Equipo Unificado (EUN) a efectos del COI, pues también integrará a Georgia, contenderá bajo la bandera y el himno olímpicos en los deportes colectivos, pero los triunfos individuales serán premiados con los símbolos de cada república.

"Una balsa de aceite". Esta frase de Juan Antonio Samaranch, el presidente del COI, resumió la reunión, que ya estaba suficientemente preparada con las conversaciones mantenidas desde hace meses con los protagonistas políticos y deportivos. Las últimas reticencias de Ucrania, la república más poderosa y contestaria ante Rusia, se zanjaron el domingo. Georgia, la única que no forman parte de la CEI ni de la ONU, incluso se ha integrado en el bloque deportivo. "No hay otra opción", dijeron sus representantes. El deporte sí tiene que ver con la política, y mucho, como dice Samaranch, y a veces va por delante. Ha sido histórico, por ejemplo, que, por primera vez, se reunieran todas las repúblicas de la ex URSS, incluida Georgia.Los comités reconocidos ayer son los de Armenia, Azerbaiyán, Bielorrusia, Georgía, Kazajstán, Kirguizistán, Moldavia, Rusia, Tayikistán, Turkmenistán, Ucrania y Uzbekistán. La condición es su participación unida en Barcelona y, si lo piden las federaciones internacionales correspondientes, en las grandes competiciones del resto del año -en otras podrán hacerlo como quieran-.

El reconocimiento es provisional para cumplir, al menos eso, la Carta Olímpica, que pide la integración de los países que aspiren a ser miembros del COI en cinco federaciones internacionales como mínimo. En ese sentido, el COI también pide a éstas que les traten con cariño. Primo Nebiolo, el presidente de la Asociación de Federaciones Internacionales Olímpicas de Verano y flamante miembro del COI por designación directa de Samaranch, no pondrá problema alguno para devolver el favor, aunque el principal es el reconocimiento de Suráfrica en la Federación Internacional de Atletismo (IAAF), que también preside: será a finales de mayo en su próximo consejo.

La sensación, tras lo sucedido ayer, es la de que se ha dado una batalla desproporcionada. Es casi seguro que las repúblicas lleven en Barcelona incluso sus banderas del mismo tamano que la olímpica inicial con la que desfilarán. Ésta se quedará ya sólo para los triunfos de equipos, ya que no se puede atender a todos los miembros de su formación. Pero en la mayoría de los casos individuales se utilizarán los símbolos de cada república.

Para este ceremonial tan complicado, cuando todas las repúblicas están reconocidas políticamente a todos los niveles, menos Georgia, el COI se ha planteado si no habría sido más sencillo reconocerlas por separado para Barcelona. La discusión del número de participantes habría sido parecida en los únicos deportes individuales que no tienen cupo fijo, Como el atletismo o la natación. José Miguel Abad, consejero delegado del COOB, llevó ayer la cifra de 267 personas entre atletas y oficiales (el total son 510 y 173, respectivamente). Pero ellos quieren 300.

Samaranch repartió al final los acuerdos en público llamando a cada representante de las repúblicas como si de un colegio que da los diplomas se tratara. En realidad, sí era una entrega de premios, pues en 1993 tendrán todos los derechos olímpicos.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_