Fiesta contra el racismo
Miles de personas ocuparon ayer el centro de Barcelona para manifestarse contra la intolerancia y el racismo. La marcha, convocada por SOS Racisme y más de un centenar de organizaciones, tuvo el apoyo de la ciudadanía. Entre 20.000 personas, según la Guardia Urbana, y 70.000, según los organizadores. Los grandes protagonistas de la manifestación fueron los inmigrantes. Acostumbrados a ir con los papeles en la boca temiendo que un mal día la policía los devuelva a su país o que algún mal vecino los insulte, ayer se veían dueños de la calle, escoltados por los agentes del orden y aupados por sus amigos de Cataluña. "Fiesta, fiesta", exclamaba un paquistaní en su pobre castellano, disfrutando de la jornada. Página 20
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