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Katrin Krabbe, suspendida por cuatro años

La atleta alemana Katrin Krabbe, campeona del mundo de 100 y 200 metros lisos, y sus compañeras Grit Breuer y Silke Moeller fueron suspendidas ayer por cuatro años al ser consideradas culpables de manipulación de un control antidopaje, anunció ayer la Federación Alemana de Atletismo (DLV). Krabbe, de 22 años, no podrá participar en los Juegos de Barcelona. La manipulación se produjo durante un control efectuado el pasado mes de enero en Suráfrica.

El escándalo se destapó tras un control contra el consumo de sustancias prohibidas efectuado el pasado 24 de enero, durante la concentración preparatoria de las atletas en Suráfrica. Las pruebas de orina mostraron una sorprendente similitud, por lo que se sospechó que procedían de una misma persona. Krabbe, Breuer y Moeller fueron suspendidas provisionalmente, hasta la conclusión de las investigaciones.El experto alemán en dopaje y director del Instituto de Control de Drogas de Colonia, Manfred Doenike, confirmó la existencia del delito, castigado por la Federación Internacional de Atletismo con igual dureza que el dopaje. El informe de la DLV señala que la manipulación fue realizada por las propias atletas o con su conocimiento y consentimiento.

"Realizadas [las pruebas] con exactitud, orden y minuciosidad, no cabe la menor duda de que las muestras (las del tipo A y las otras tres del B para el contraanálisis) provienen de la misma orina o del mismo envase en el que se pudo realizar una mezcla de orina", recoge el texto de la declaración de la DLV.

"Los resultados fueron confirmados por los expertos solicitados por las atletas y por la propia federación, que analizaron las muestras B", añade el comunicado. El entrenador del trío de velocistas, Thomas Springstein, fue suspendido de por vida. La Federación Internacional de Atletismo (IAAF) aumentó el pasado año la suspensión de dos a cuatro años para aquellos atletas que se dopen o cometan fraudes en los controles antidopaje.

Reacción positiva

Hans Envers, director de la comisión antidopaje del Consejo Alemán de Deportes, consideró muy positiva la suspensión de Krabbe, Breuer y Moeller: "Si el deporte es corrupto, no podemos tener en cuenta la fama y prestigio de las personas envueltas en el fraude". En la declaración se indicó que el pasado año ocurrió un asunto similar, concretamente en un control que tuvo lugar en la localidad alemana de Zinnowitz en el mes de julio. En aquella ocasión, las muestras de orina de Breuer y Krabbe fueron idénticas.

El escándalo ha suscitado una considerable polémica en los últimos días. La atleta aseguraba que era inocente y que recurriría a los tribunales de justicia si la suspendían por fraude. Según el derecho alemán, los recursos a la justicia ordinaria suspenden automáticamente la decisión de una instancia deportiva federal.

Las críticas contra Krabbe comenzaron antes de conocerse el fraude en el control antidopaje. Su presencia en Suráfrica junto a Breuer y Moeller desató la polémica en los medios deportivos y políticos de Alemania. En algunos medios se atacaba la inoportunidad de los entrenamientos de las atletas en un país que todavía provoca serías dudas sobre la integración racial. Por otro, se abrían fuertes interrogantes sobre la insistencia de Krabbe y Breuer en permanecer siempre en lugares alejados, de difícil control para los directivos y médicos de la Federación Alemana de Atletismo, lejos en todo caso de los sitios comunes de entrenamiento para los atletas germanos.

Katrin Krabbe es la figura más prominente del atletismo femenino en el mundo. Fue la figura más destacada de los Mundiales de Atletismo celebrados en Tokio en 1991. Allí consiguió los títulos de 100 y 200 metros y dejó clara su supremacía sobre la jamaicana Merlene Ottey, que había llegado a la capital japonesa con mejores marcas durante la temporada. Breuer ganó la medalla de plata en 400 metros por delante de la española Sandra Myers y es la actual campeona de Europa en dicha distancia Moeller fue campeona mundial de 100 y 200 metros en Roma 87, cuando corría con su apellido de soltera: Gladisch.

Krabbe era la atleta que había salido mejor parada del derrumbe de la antigua República Democrática de Alemania. Lejos de padecer los efectos de la falta de apoyo económico que han soportado la mayoría de sus compañeras, Krabbe ha estado sostenida durante estos dos últimos años por una compañía estadounidense de calzado deportivo, que ha financiado el club Neobrandenburgo, donde la velocista estaba dirigida por Springstein, un técnico bajo sospecha en los últimos años. Según algunas fuentes, la atleta ganó el pasado año alrededor de un millón de marcos (unos 68 millones de pesetas).

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