La rivalidad entre Murdoch y Maxwell, en Canal +
La desaparición el pasado martes del magnate de la comunicación Robert Maxwell añade un interés suplementario al documental Imperio (Canal +, 15.00 horas), una producción para el Channel 4 británico en la que el periodista Christopher Hird investiga la irresistible ascensión y declive de otro gran coloso de la comunicación, el australiano Rupert Murdoch.Una rivalidad sin tregua enfrentó de hecho durante muchos años a Robert Maxwell y Rupert Murdoch, poseedores ambos de importantes intereses en la prensa británica y durante un tiempo rivales por sus cadenas de televisión vía satélite Super Channel y Sky Channel.
Rupert Murdoch empezó hace treinta años como propietario de un modesto periódico en Australia. Ahora es el dueño de un imperio multimediático de alcance mundial en el que se cuentan propiedades en la prensa, el mundo editorial y en la producción y difusión del cine y televisión. Christopher Hird pone a prueba su experiencia como periodista de investigación en este seguimiento paso a paso del proceso de esta irresistible ascensión que en la década de los años ochenta alcanza su mayor agresividad.
La compra por el grupo de Murdoch, News Corporation, del 50% de la Twentieth Century Fox, en 1985, fue una fecha clave en el proceso de expansión. Con esta operación el magnate australiano hace realidad su acariciado sueño de entrar en la industria norteamericana del cine y la televisión. Es sólo un peldaño.
Unos meses más tarde se haría con el control total de la firma, además de comprar varias estaciones de televisión que se convertirán en la cuarta cadena de Estados Unidos, la Fox, una de las operaciones de mayor éxito del magnate. Un banquero especializado en el mundo del espectáculo escribió por esas fechas en The Wall Street Journal: "Rupert Murdoch es un hombre orquesta que no juega jamás un papel pasivo y al que no le gusta colaborar con los otros". En Europa, su cadena Sky Channel (ahora fusionada con la British Satellite Broadcasting, y rebautizada NSkyB) emite vía satélite. Pero la consolidación de este imperio multimedia topa continuamente con la legislación vigente en los países en los que se radican sus empresas.
Christopher Hird dedica una parte sustancial de su investigación a indagar este aspecto, al mismo tiempo que se cuestiona la supervivencia de este imperio con importantes deudas.
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