León, Vahnojado, Aufión

El suceso de Boadilla tiene tres antecedentes de pacíficos ciudadanos tiroteados por la Guardia Civil. El 20 de febrero de 1983, agentes de ese cuerpo de seguridad tirotearon un coche en Valmojado (Toledo). Los ocupantes del vehículo no hicieron caso de las señales de linterna que vieron, ya que su conductor pensó que se trataba de gamberros. Como resultado del tiroteo murió Juan Félix Domínguez, de dos años. Su madre resultó herida. El guardia civil Enrique Gómez fue condenado a dos meses por imprudencia temeraria y a una indemnización de un millón de pesetas.El 1 de octubre de 1983, una pareja de novios fue tiroteada cuando se encontraba en su coche a las afueras de León. Felisa de la Varga y José Luis Otero tomaron a los guardias civiles por un grupo de merodeadores y se dieron a la fuga. La novia quedó herida grave en la zona lumbar y tardó años en recuperarse. El caso fue archivado, aunque después se volvió a abrir.El 30 de abril de 1985, el guardia civil Jesús Gómez mató de un disparo a Juan Carlos Benito, de 21 años, cuando cogía caracoles en Auñón (Guadalajara). Los disparos fueron realizados a menos de 100 metros. El agente fue condenado a cinco años de cárcel.