La redada contra los 'skin heads' termina con ocho jóvenes en prisión y 70 libres

La redada policial contra skin heads (cabezas rapadas) efectuada el pasado domingo, 24 horas después de las agresiones llevadas a cabo por jóvenes ultraderechistas en Barcelona, ha concluido con más de 70 personas sin cargos y ocho en prisión. El juez de guardia dejó ayer en libertad a 12 detenidos, ninguno de los cuales es skin, colectivo que provocó los violentos incidentes. El pasado martes, el magistrado de guardia hizo lo mismo con cinco jóvenes que fueron detenidos sólo por sus "características físicas", según precisaba el atestado.De las 76 personas que la policía detuvo en la redada del domingo, sólo dos han ingresado en prisión. Otro detenido permanece en comisaría, acusado de agredir a un homosexual. La policía tuvo que dejar en libertad a la inmensa mayoría de detenidos, ya que sólo ha puesto a diSposición del juez a 18 personas, sin contar los arrestados por los mossos.

Los Mossos d'Esquadra detuvieron ayer a Héctor Simón Guilera, hermano gemelo de uno de los skins que entraron el pasado martes en la cárcel.

El gobernador civil de Barcelona, Ferran Cardenal, y el consejero de Gobernación de la Generalitat, Josep Gomis, fijaron para la semana próxima la convocatoria de la Junta de Seguridad en la que, entre otras cuestiones, abordarán la actuación policial del pasado sábado. Gomis calificó la inhibición de la policía de "incomprensible". El primer secretario del Parti dels Socialistes (PSC), Raimon Obiols, requirió ayer a los responsables de seguridad de las dos administraciones para que lleguen a un entendimiento en la Junta de Seguridad.

El Sindicato Profesional de Policía Uniformada (SPPU) trasladó la responsabilidad de los sucesos del sábado a Cardenal. Un comunicado de este sindicato expresa que las responsabilidades deben exigirse "al más alto grado, y no a los policías expedientados". La Unión de Policía de Catalunya (UPC), sindicato de los Mossos d`Esquadra, pidió ayer la dimisión del gobernador civil.