El debate sobre el final del comunismo aflora en el PSOE desde perspectivas diferentes

Las consecuencias para los socialistas del derrumbe de los países comunistas fueron analizadas ayer por el Comité Federal del PSOE, donde se puso de manifiesto la existencia de tres corrientes de pensamiento en el seno del partido.Carlos Solchaga, ministro de Economía, mostró unas tesis que fueron calificadas de "liberalismo social" mientras que al otro extremo se situó el representante de Izquierda Socialista, Antonio García Santesmases, defendiendo a ultranza el socialismo democrático y entre ambas posiciones se situaron el secretario general y el vicesecretario general, Felipe González y Alfonso Guerra, respectivamente.

Este Comité Federal tuvo un significado de reflexión muy distinto de otros anteriores, en los que estuvieron presentes discusiones internas. El debate sobre las consecuencias para los socialistas del hundimiento del comunismo se prolongó durante más de cuatro horas por lo que el siguiente punto del orden del día, cual era el pacto de Estado autonómico, se consumió en líneas generales sin entrar en el espinoso asunto de la financiación, que es "donde habrá problemas", según manifestaron dirigentes del PSOE a la salida de esta reunión a puerta cerrada que terminó pasadas las 11 de la noche.

Relaciones con IU

Distintos interlocutores coincidieron en señalar que el debate había sido "muy interesante y riguroso" y había tenido la virtualidad de poner de manifiesto las distintas posiciones ideológicas que coexisten en el PSOE. En el otro extremo se situaron los miembros de Izquierda Socialista, concretamente Antonio García Santesmases, que en un análisis histórico defendió la trayectoria del socialismo democrático. Felipe González reivindicó igualmente para el futuro las señas de identidad del socialismo democrático pero en el contexto de la construcción europea. Alfonso Guerra señaló que "el hundimiento de las tesis comunistas y el intento que está haciendo parte de la derecha para rentabilizar la situación exigen que el mensaje del socialismo democrático se exprese con mayor fuerza diferenciándolo del discurso conservador, cada vez más confuso".

Este debate fue precedido por declaraciones anteriores de dirigentes socialistas que se felicitaron por la posibilidad de establecer unas relaciones normales con IU tomando como base la reunión celebrada esta semana. Otro punto del debate fue el tipo de partido que se necesita para esta nueva etapa que los socialistas quieren empezar. Y en ese contexto Felipe González advirtió sobre "el peligro de la territorialización". Dirigentes socialistas interpretan que a Gollzález no le parece idóneo que el partido socialista se rija por criterios de región o nacionalidad.

La ausencia del ex secretario de finanzas Guillermo Galeote fue disculpada por Benegas con el argumento de que está esperando el dictamen del Tribunal de Cuentas sobre la financiación del partido".