Alcalá, puerta de Madrid
Alcalá de Henares, puerta de Madrid, como gustan denominar a su ciudad los alcalainos, vive desde ayer sus ferias y Fiestas, que se prolongarán hasta el día 1 de septiembre. En ellas, como cada año, no faltará la diversión, el buen humor, el exceso de alcohol y, múltiples actividades programadas por autoridades y vecinos a través de las cada vez más importantes y numerosas peñas.Relata la historia que "el castillo o fortaleza", significado de la palabra alcalá, de origen musulmán, recibió de manos del rey Alfonso X el Sabio la concesión de poder organizar una feria el 24 de agosto. Desde entonces se celebra San Bartolomé, aunque en nuestros días con un significado bien distinto al de entonces. No hace mucho en Alcalá de Henares se realizaban ferias de ganado los días 24 de agosto y 11 de septiembre.
Pero otros dos aspectos de índole totalmente diferente han distinguido a esta ciudad, poblada en la actualidad por más de 150.000 habitantes. Por una parte, los restos arqueológicos encontrados en sucesivas excavaciones, que recuerdan el origen romano de Alcalá, denominada en su día Complutum. La existencia de una esplendorosa universidad que cada vez recobra mayor importancia conforma la otra se la de identidad de la ciudad.
'Rey del culebrón'
Carlos Mata, el rey del culebrón, salió ayer de su prisión televisiva para desde el balcón del Ayuntamiento pregonar a los cuatro vientos el comienzo de la Semana Grande Alcalaína, pero esta vez teniendo como adversarios dialécticos a los trabajadores de la Seda de Barcelona en vez de a Gabriela Suárez.Como cada año, los habitantes de la ciudad complutense se levantarán todos los días con la diana floreada que recorrerá los diferentes distritos de la ciudad. Deporte, cultura, juegos para niños, humor, rock y ocio conforman un ambicioso programa de fiestas. Pero las peñas en esta ocasión han exprimido su buen hacer para deleitarnos con concursos muy especiales.
Al cuarto concurso de triciclos, la séptima carrera de patos o el quinto descenso con piragua por la calle Libreros, se unen este año una carrera de camas, la cogida de cerdos o la carrera de cubos. Para los amantes del vino y la comida, la plaza de Cervantes será escenario de la gran tronada. Jóvenes y adultos se abandonarán a mojar con buen vino un plato de migas. A pesar de contar con buenas corridas de toros, los encierros de Alcalá son protagonizados por vaquillas. A buen seguro que alcalaínos ilustres como don Manuel Azaña o Miguel de Cervantes se sentirían satisfechos, al igual que lo hicieron en su época, al observar al pueblo de Alcalá de Henares olvidar sus penas ahogados en la algarabía de sus fiestas.
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