_
_
_
_
Entrevista:

"Esta casa no está para el derribo"

Está tranquilo y sonriente en pleno ferragosto, recién superada una huelga que amenazaba con borrar de las pantallas los anagramas de TVE-1 y La 2. Ya tiene lista la programación del último trimestre, parte de la cual tendrá que pagar con dinero prestado del Banco Exterior.Pregunta. ¿Cuánto tiempo van a aguantar si no llegan las subvenciones?

Respuesta. Aplicaremos una economía doméstica. Tendremos que aguantar con lo que hay hasta fin de año. Da la impresión de que esta casa está para el derribo y para el cierre, pero no es verdad.

P. En esas condiciones, ¿será dificil mantenerse los primeros en audiencia?

R. Las privadas ya llegan a un 70% de la población y seguimos siendo los primeros. En las cinco grandes capitales, donde son un peso pesado, la audiencia nos sigue siendo favorable, y en algunas autonomías, donde hay hasta cinco canales y la competencia es mucho más dura, también. No estamos relajados, pero sí tenemos mayor relajo que al principio. Tenemos menos dinero y el que tenemos -23.500 millones- lo vamos a gastar en la primera productora, que es esta casa.

P. Se habla de la privatización de una de las dos cadenas.

R. Ésa es una cuestión que no es de mi incumbencia. Lo mío es la programación. El PP ha propuesto privatizar La 2, pero hoy por hoy lo veo imposible por cuestiones operativas. De todas maneras, hoy el negocio de la televisión está en la producción, no en la emisión.

P. ¿Los conflictos laborales repercuten en la audiencia?

R. No me gusta hablar de esos temas. Quiero ser prudente. Del conflicto pasado quiero destacar que se logró un acuerdo en los servicios mínimos para la huelga y después su desconvocatoria. Pero lo más positivo es que se ha vuelto a la negociación. Nunca será poco el esfuerzo que se haga por el diálogo y la negociación. Quiero recordar el caso de Francia, que me impresionó mucho. Una huelga en las dos televisiones públicas, Antenne 2 y F-3, provocó el descenso veloz de sus cifras de audiencia. Durante varios días se perdió el contacto entre la audiencia y las cadenas, hecho que fue aprovechado por la recién privatizada, TF-1. Pues bien, buena parte del público que se desconectó de A-2 y F-3 no ha vuelto.

P. Los sindicatos le han acusado de contratar demasiados programas fuera.

R. Algún día se hará justicia sobre ese asunto. Yo seré el productor que menos ha contratado a productoras privadas. Creo que ahora se aprovechan los recursos mejor que nunca. Se ha hecho un registro de proyectos. Se han creado comités de doble lectura. Todos los procesos de producción y programación son sancionados por un comité estratégico....

P. ¿Eso significa que antes se cometían irregularidades? ¿Qué me dice del caso Stres?

R. Significa que antes había un sistema y ahora otro. Se llevaba un proyecto a la dirección y si gustaba se hacía. Sin prejuzgar el sistema anterior, cuantas más luces haya mejor. Stres fue un programa fallido. Se le dio el visto bueno sobre el papel. Creo que hubo errores por nuestra parte y por la empresa que lo producía. Pero yo particularmente he visto dos programas peores que Stres, infinitamente peores, de los que no se ha hablado tanto.

Disfrute del folletón

P. Con las privadas en todo el territorio, ¿va a cambiar la línea de TVE- 1 y La 2 para el cuarto trimestre?R. Las decisiones que se tomaron en su día creo que han sido acertadas. Una programación generalista de entretenimiento y de ficción en TVE- 1, y de la misma manera -con documentales tipo Equinoccio- para una audiencia pública urbana en La 2. A propósito, el último espacio de Equinoccio igualó la audiencia de Nieves Herrero con De tú a tú, hecho que me parece muy positivo.

P. ¿Alguna incorporación nueva tras la marcha de Hermida? ¿Quién le va a sustituir?

R. Estamos barajando varios nombres. Entre los que vuelven, Carlos Herrera con Primero izquierda, una especie de show; Manuel Campo Vidal, con un Talk show clásico; Un, dos, tres ... ; Labordeta, con una serie documental; una telecomedia de Ozores; La piovra; un programa sobre desaparecidos.... Las novedades las presentaremos dentro de un mes en Lanzarote.

P. ¿Hacen cuestionarlos de aceptación sobre nuevos programas?

R. Lo hicimos con La dama de rosa. Dio que lo último que había que poner era ese culebrón, pero tuvimos una corazonada y la emitimos.

P. Está barriendo, ¿no?

R. El 8 de agosto la vieron 6.600.000 espectadores, el 75% de la audiencia.

P. ¿La programaría en horario de prime time? ¿Las televisiones públicas están para eso?

R. Eso lo ha hecho Tele 5. Nosotros no lo haríamos nunca.

P. Usted va a dirigir un curso en El Escorial sobre las tendencias de la televisión. ¿Cómo se adivina ese futuro?

R. No se sabe. Ha habido tantos cambios tecnológicos... Las privadas acaban de arrancar y ya se habla del cable. Antes el programador decidía, ahora quien programa es el espectador. Otra cosa son las ofertas. No hay suficientes programas. Hay que aumentar la producción europea, rebajar los costes. Es más barato producir en Estados Unidos y Australia que en Europa.

P. ¿Cómo es posible?

R. Hay muchísimas razones. Allí ruedan un episodio por semana, cobran menos por ser televisión y los sueldos están menos regulados por los sindicatos. Aquí -y siento decirlo porque no va contra Pilar Miró-, desde que el cine contó con ayudas oficiales se dispararon los costes.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_