_
_
_
_
_

Los acreedores británicos del BCCI exigen prioridad en la liquidación de activos

Enric González

Los acreedores británicos del Bank of Credit and Commerce International (BCCI) han iniciado una campaña con el objetivo de impedir que los activos del banco en el Reino Unido sean utilizados para atender las reclamaciones de miles de acreedores en el resto del mundo.Los fondos del BCCI "congelados" por el Banco de Inglaterra ascienden a unos 1.700 millones de libras (más de 320.000 millones de pesetas), mucho dinero en comparación con el diseminado por los restantes 68 países en que operaba la entidad. En la mayoría de esos países, la diferencia entre activos y deudas resulta negativa.

El desequilibrio entre la relativa salud de los activos británicos y las deudas en los otros países se explica por una orden cautelar del gobernador del Banco de Inglaterra, Robin Leigh-Pemberton, emitida hace un año. La orden limitaba al máximo los movimientos de capitales entre las 24 oficinas británicas del BCCI y las del resto del mundo, en previsión de lo que posteriormente sucedió. Los acreedores del Reino Unido exigen una separación total entre las finanzas locales y las demás en el proceso de liquidación de activos y pago de compensaciones.

El gobernador Leigh-Pemberton declaró ayer que "no habrá discriminaciones" entre los clientes del BCCI, sea cual sea su nacionalidad y residencia, lo que fomentó los temores de los impositores británicos. Estos temen que la Administración de Londres tienda a mostrarse especialmente generosa respecto a los acreedores de los países musulmanes, muchos de los cuales ven el cierre del BCCI como una "represalia" contra un "banco islámico".

La relación entre el banco y la guerra, en general, resulta bastante directa. Según los investigadores oficiales, el conflictivo banco propició la creación de un consorcio secreto que unía a la Argentina de los generales Viola, Videla y Galtieri, con el Pakistán del general Zia y el régimen del coronel Gadafi en Libia. El consorcio pretendía la adquisición clandestina de tecnología y materiales para producir armamento nuclear en los tres países.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_